Las aerolíneas tienen la razón. El cabotaje y las quintas libertades no son el camino para desarrollar el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que no trae vuelos. Vaya, ni el presidente López Obrador ha tomado un vuelo desde el Felipe Ángeles.
El AIFA está lejos de la Ciudad de México y lo inauguraron sin vías de acceso. Apenas le están poniendo carreteras y tren urbano para conectarlo.
Además, el AIFA no puede realizar viajes a Estados Unidos porque no tenemos la Categoría 1, la cual perdimos en el momento en que la autoridad estadunidense, la Federal Aviation Administration, consideró a México con bajos niveles de seguridad aérea, sobre todo al revisar la Agencia Federal de Aviación Civil.
Sin embargo, el general Isidoro Pastor, director del Felipe Ángeles, ha propuesto reactivar el aeropuerto AIFA mediante el cabotaje, es decir, que sólo el AIFA pueda tener vuelos con aerolíneas internacionales que levanten pasajeros al interior del país.
El general Pastor, obvio, está desesperado. Dice que sólo en el AIFA se daría el cabotaje, y no en los otros 77 aeropuertos del país.
El problema es abrir el cabotaje para la aviación nacional: sería el desastre.
Imagínese, por ejemplo, a American Airlines volando AIFA-Guadalajara, en ese momento puede depredar el mercado, bajar sus precios a costos y quebrar a las aerolíneas mexicanas. Las aerolíneas internacionales son mucho más grandes que las mexicanas.
Al presidente López Obrador le han contado que hay poca competencia en el sector aéreo.
Por eso ayer la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), donde están aerolíneas, taxis aéreos, empresas cargueras. pidió al gobierno hacer todo lo posible para regresar a la Categoría 1 y, así, ayudar al Aeropuerto Felipe Ángeles.
Y un dato importante: ya hay competencia aérea. Hoy en día existen 220 rutas domésticas, logrando resarcir las pérdidas de cuando salió Interjet. En algunas rutas, incluso, se ha sentido guerra de precios. No necesitas que vengan las aerolíneas extranjeras a volar al interior del país y depredar el mercado tumbando precios a costos, para después ser las únicas sobrevivientes.
BIEN EL SALARIO MÍNIMO… ¿PERO QUIÉN AYUDA A LAS PYMES?
El salario mínimo aumentará 20%, lo adelantó el presidente López Obrador aun antes de que la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) lo dé a conocer el 1 de diciembre.
Los empresarios estaban más por un aumento del 15 por ciento. Pero el del 20% lo absorben, según lo dicho por el Consejo Coordinador Empresarial y la Coparmex.
El salario mínimo ha tenido una ruta de recuperación real, lo cual es totalmente positivo.
Debe ser el salario mínimo para mantener una familia, en los bienes y servicios esenciales. Va hacia ese camino.
Y ahora con la inflación de 8.7%, el monto de recuperación llevó al salario mínimo a un alza de 20% anual para 2023.
Sin embargo, habrá que revisar los costos para las pequeñas empresas. En 2023 también entran las vacaciones de 6 a 12 días laborales, así como la mayor aportación patronal para las pensiones de los trabajadores. Y las pymes no han tenido un solo colchón.
EMPRESARIOS CON EL INE… ¿O NO?
Que Francisco Cervantes (CCE) y Antonio del Valle (CMN) fueron a la marcha del presidente López Obrador porque los invitaron al IV Informe de Gobierno. De hecho, fueron los únicos trajeados y con corbata; elegantes, eso sí. Sin embargo, la marcha del presidente López Obrador pudo verse como una acción en contra del INE, ya que se da como respuesta a la marcha ciudadana para defender a ese instituto. Y como los empresarios han externado estar a favor del Instituto Nacional Electoral, ¿entonces mandaron mensajes encontrados?
Este artículo fue publicado en Excélsior el 29 de noviembre de 2022. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.