Después de que la semana pasada varias organizaciones de derechos humanos criticaron el acuerdo de la Unión Europea (UE) y Turquía sobre los refugiados, este lunes Bruselas informó que no harán expulsiones comunitarias prohibidas por la Convención de Ginebra.
La UE, quien se mantiene firme en su decisión para no recibir a más migrantes, aseguró que cada persona tendrá la posibilidad de solicitar asilo en el primer país europeo al que llegue, sin embargo, en caso de ser rechazado tendrá que regresar a su lugar de origen.
Bruselas detalló que espera que dichos procesos no tarden más que unos días para que no se acumulen los demandantes de asilo en países como Grecia, uno de los más afectados por la crisis de refugiados, pues actualmente mantienen a 35 mil personas.
Además, de que planea que los migrantes que lleguen a territorio griego o turco no avancen a otros países para que todo el proceso se resuelva en un mismo lugar.
En cualquier caso, se analizaría cada petición individualmente y sería posible conceder protección en el club comunitario a refugiados cuyo bienestar no esté garantizado en Turquía.
La Comisión Europea presentará este miércoles un documento que aclara los aspectos jurídicos del acuerdo esbozado con Turquía, el cual aún debe ser ratificado por el Consejo Europeo esta semana.
Organizaciones como ACNUR, Amnistía Internacional y Médicos Sin Fronteras advirtieron que el programa para regresar a los migrantes que escapan de la guerra va en contra de los derechos humanos y que la expulsión colectiva está prohibida por el la Convención Europea que establece que la deportación directa de extranjeros hacía un país tercero no es compatible con la legislación internacional.
(Con información de El País)
slg