Desde que Sanjuana Martínez asumió el cargo como directora de la Agencia de Noticias del Estado Mexicano (Notimex) hubo diversos señalamientos sobre sus implicaciones. Y los vaticinios más pesimistas se han ido cumpliendo.
Desde el 21 de marzo de 2019, cuando la señora Martínez asumió el cargo, hasta la fecha, el periplo de Notimex ha sido plagado de anomalías: trabajadores despedidos injustamente, una huelga desconocida por la directiva que, por ello, conculca sus derechos laborales y un sin fin de desatinos e imprecisiones en la información proporcionada por la Agencia son sólo algunas de ellas.
Día con día hemos sido testigos del deterioro del servicio de Notimex respecto de la solidez ética y profesional de las notas informativas que ofrece (tanto así que se ha vuelto costumbre borrar contenidos dado sus errores o imprecisiones). Pero acaso una de las constantes más preocupantes es que la Agencia se ha vuelto en este gobierno, junto con los llamados medios públicos, una caja de resonancia de la propaganda oficial.
A todo ello hay que sumar las denuncias que, el día de hoy, fueron difundidas en el portal de Aristegui Noticias sobre estrategias muy cuestionables para elaborar campañas contra varias periodistas entre quienes se encuentra la propia Aristegui, Dolia Estevez, Marcela Turati y Lydia Cacho entre otras. La asociación Artículo 19 comparte la misma información y por ello exige una indagatoria además de la destitución del cargo de Sanjuana Martínez mientras dure la investigación.
Recientemente el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, se quejó del uso de bots y troles en Twitter para impulsar campañas de desprestigio contra su gobierno. Y ahora se demuestra que desde Notimex se han impulsado estas campañas. Sin duda, López Obrador tendría que ser transparente y actuar en consecuencia.