La muerte de 22 personas por complicaciones de la influenza AH1N1 ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias de Bolivia por la escasez de vacunas en la región oriental de Santa Cruz, la más castigada por la epidemia, ha reconocido este martes el director de Epidemiologia del Ministerio de Salud, Rodolfo Rocabado.
Ocho personas han muerto en Santa Cruz, localidad situada a 540 kilómetros al este de La Paz, mientras que en la capital se registraron siete fallecimientos. Otras siete muertes se produjeron en diferentes ciudades. Las autoridades temen que los casos aumenten debido a que el invierno está en su inicio y julio registra temperaturas más bajas.
La semana pasada las autoridades sanitarias declararon el alerta en Santa Cruz, la región más poblada del país con más de 2.6 millones de habitantes. Rocabado dijo que el año pasado Bolivia no registró muertes por AH1N1 probablemente por el alto nivel de vacunación. En tanto, Boris Chang, responsable del Programa de Influenza en Santa Cruz, explicó que se ha solicitado más dosis para abastecer la demanda.
(Con información de AP)