Ante el inminente proceso electoral en Costa Rica y dado el contexto mundial de invasión masiva de ‘fake news’, el diario costarricense La Nación ha iniciado el proyecto “No coma cuento”, con el que desmentirá las informaciones falsas que surjan en el escenario electoral local, a fin de brindar una mayor claridad al votante.
En un reportaje en las páginas del citado diario, la periodista Lucía Astorga recordó que Costa Rica renovará el próximo 4 de febrero a sus autoridades ejecutivas y legislativas, en un contexto muy diferente al que enfrentaba el país hace cuatro años: “Los ciudadanos asistirán a las urnas en el marco de sonados escándalos políticos y en medio de un fenómeno global que está afectando a las democracias fuertemente: las ‘fake news’“.
En el proyecto “No coma cuento”, un equipo de periodistas someterá a la prueba de la verdad las informaciones provenientes de las distintas campañas políticas que participan en la actual competencia electoral y monitoreará la información que circule en redes sociales.
Además, los ciudadanos podrán enviar cualquier información que genere dudas al WhatsApp del diario (6197-1494) o al correo electrónico lucia.astorga@nacion.com. Además, podrán etiquetar informaciones “sospechosas” en Facebook o Twitter con el hashtag #NoComaCuento
El término ‘fake news’ describe, según el diccionario Collins (que la escogió como la palabra del año 2017), a cualquier “información falsa, a menudo sensacionalista, diseminada bajo la apariencia de un reportaje de noticias“. Detrás de esa frase se esconde una vieja práctica que data de los siglos XVIII y XIX cuando se utilizaban panfletos para difundir rumores, según explica AFP en este reportaje:
En la actualidad, los mensajes engañosos o falsos se han vueltos más poderosos y amenazantes, debido a la velocidad con la que pueden ser divulgados, su potencial alcance y el bajo costo de producirlos, agregó Astorga.
Las ‘fake news’ tomaron fuerza durante las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2016, pero rápidamente se diseminaron a otros escenarios políticos en el mundo: “La manipulación y las tácticas de desinformación jugaron un papel importante en las elecciones de al menos otros 17 países el año pasado, perjudicando la habilidad de los ciudadanos para elegir a sus líderes basados en noticias reales y debate auténtico”, advirtió Freedom House en su informe de noviembre pasado.
El 12 de abril pasado, Facebook anunció que suspendería 30 mil cuentas de su red social en Francia, diez días antes de que el país europeo realizara la primera ronda de sus elecciones presidenciales.
La medida se dio tras fuertes presiones, por parte de los países europeos para exigir a la empresa de Mark Zuckerberg mayores acciones y agilidad para remover contenido propagandístico extremista.
Dos días después, la red social compró espacios publicitarios de una página completa en los principales periódicos de Francia y Alemania, en los que describían cómo los lectores pueden evaluar las noticias e identificar los informes falsos. En mayo hizo algo similar en Reino Unido, previo a los comicios parlamentarios del 8 de junio.
“El uso de comentaristas pagados y bots políticos para difundir propaganda gubernamental fue iniciado por China y Rusia, pero ahora se ha vuelto global“, dijo Michael J. Abramowitz, presidente de Freedom House. “Los efectos de estas técnicas de difusión rápida sobre la democracia y el activismo cívico son potencialmente devastadores”, concluye la recopilación de La Nación.
aml