El número de muertos por el atentado del 14 de octubre en Mogadiscio se elevó a 358 personas, comunicó el ministro de Información somalí, Abdirahman Osman. Por su parte, la ACNUR señaló que el ataque “es uno de los más mortales perpetrados contra civiles en la historia de Somalia“.
La Agencia de la ONU para los Refugiados ha entregado suministros de socorro a las autoridades locales en Mogadiscio, a fin de ayudar a los sobrevivientes del ataque masivo con bombas del sábado anterior.
El ataque mortal, que tuvo lugar en una concurrida zona comercial de la ciudad, lleva ya 358 víctimas fatales y cientos de heridos, dejando una enorme destrucción a su paso. Más de 200 personas siguen desaparecidas.
La ACNUR ha proporcionado artículos no alimentarios, equipos y apoyo logístico a las autoridades. Se entregaron tiendas de campaña familiares y de almacenamiento, generadores eléctricos y kits de socorro, incluyendo lonas plásticas, juegos de cocina, mantas térmicas, jabón y colchonetas. Esta ayuda apoyará a más de mil familias afectadas.
La asistencia de ACNUR es parte de esfuerzos de la ONU para apoyar la respuesta de emergencia después de que el comité somalí de gestión de crisis la solicitara. Otras organizaciones humanitarias, donantes, el sector privado y las organizaciones de la sociedad civil se han unido a la respuesta dirigida por el gobierno para ayudar a las víctimas del ataque proporcionando ayuda urgente para salvar vidas.
“El ataque es uno de los más mortales perpetrados contra civiles en la historia de Somalia“, señaló Filippo Grandi, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados; expresó su conmoción y tristeza al ofrecer sus condolencias al presidente de Somalia, Mohamed Abdullahi Mohamed Farmajo, en una carta del 16 de octubre.
“El ataque muestra la necesidad de que la comunidad internacional refuerce y mantenga su compromiso de apoyar al gobierno para crear un ambiente seguro para el pueblo somalí”, añadió Grandi.
La emergencia ha puesto de nuevo la atención sobre la necesidad de esfuerzos concertados para garantizar que los refugiados somalíes desplazados en la región del Cuerno de África que eligen regresar voluntariamente a Somalia, estén a salvo. Desde 2014, más de 100 mil refugiados somalíes han regresado a sus hogares.
El personal del ACNUR con base en Somalia continúa trabajando con las autoridades locales para ayudar a cientos de miles de somalíes desplazados por la continua inseguridad y la sequía dentro del país.
(Con información de Mundo y ACNUR)
aml