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18 de mayo de 1995, en el estadio O-Rena de Orlando (Estados Unidos) se define el sexto juego en las semifinales de la Conferencia Este de la NBA. Los Magic de Shaquille O’Neal, Nick Anderson y Horace Grant buscan definir la serie que ganan por 3 a 2 contra los ya míticos Chicago Bulls, que acababan de reincorporar a Michael Jordan, tras su aventura en el béisbol. MJ no había tenido pretemporada y daba ventajas en lo físico y su rival lo estaba aprovechando. A falta de 26 segundos para el final del partido, los Bulls pierden por dos puntos y tienen la posesión de la pelota. Lógicamente la estrategia es darle la última bola de la noche al crack, que encara a la defensa para lograr el milagro, pero rebota contra O’Neil que impone su potencia. Exigido, el 23 trata de tirar pero falla, como pocas veces en su carrera.

La furia por la derrota y su flojo desempeño, sumado a la picante frase de Nick Anderson (“No se parecía al viejo Michael Jordan”) llevó a este adicto a la competencia a ponerse a entrenar de inmediato, para volver con todo y desquitarse en la siguiente temporada. Fue entonces que llegó una propuesta insólita de su agente David Falk. Harto de rechazar ofertas de Hollywood para que el ídolo encarne personajes en sus películas, el representante encontró la vuelta para que Michael pueda estar en la pantalla grande sin hacer papelones por su poco talento para la actuación. “Sólo podés hacer un papel”, le explicó con mucho criterio y completó: “Únicamente sabés hacer de Michael Jordan”.

Con el “ok” de su estrella, Falk mandó un mensaje breve y contundente a los estudios Warner Bros.: “Michael Jordan y Bugs Bunny, el guión ya lo hacemos luego”. Pero, de acuerdo al relato de Javier Sánchez en la revista GQ, esa propuesta fue rechazada. De modo que el agente optó por eliminar los intermediarios y escribirle a su mejor amigo en Warner: el director de merchandising, con quien ya habían trabajado en publicidades anteriores. En cuestión de días el acuerdo estaba sellado. Y así, mientras MJ masticaba la bronca por la eliminación en los playoffs y se preparaba para lo que luego sería un año récord de los Bulls en la NBA, ingresaba al set de filmación para rodar “Space Jam”.

Más información: https://bit.ly/2LEW3iI

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