A fin de acelerar la construcción del muro fronterizo con México, el gobierno de Estados Unidos anunció la emisión de una serie de permisos, aun cuando éstos no de ajusten del todos a algunas leyes y regulaciones ambientales.
En un comunicado, el Departamento de Seguridad Nacional adelantó la instalación de barreras y caminos de seguridad a lo largo de la frontera sur en la zona colindante con la ciudad de San Diego. Dicho proyecto se enfocaría en un segmento de alrededor de 24 kilómetros.
“El sector es un área de alta entrada de ilegales, por lo que hay una necesidad inmediata de mejorar la infraestructura actual y construir barreras adicionales”, indica el documento.
De acuerdo con estimaciones de la Patrulla Fronteriza de EU, durante 2016 fueron detenidos 31 mil inmigrantes en ese segmento de frontera, además de incautarse poco más de cuatro toneladas de drogas.
La dispensa a las leyes es una atribución otorgada por el Congreso al Departamento de Seguridad Nacional y abarca diversas normativas, incluyendo las relacionadas con el medio ambiente, recursos naturales y uso de suelo. No obstante, el gobierno estadounidense dejó en claro que a pesar de su decisión, mantiene su compromiso con el medio ambiente.
De esta forma se da cumplimiento a la orden ejecutiva del presidente, Donald Trump, para construir un muro y mejorar la infraestructura ya existente “usando apropiados materiales y tecnología para lograr de manera más eficiente el control operacional de la frontera”, concluye el boletín.
(Con información de Reuters)
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