Este miércoles, el Tribunal de Nápoles pidió cinco años de cárcel para el expresidente italiano, Silvio Berlusconi, esta vez bajo la acusación de haber sobornado a un legislador del Parlamento italiano, mismo que ayudó a consolidar su mandato.
Además, el tribunal, que dictará sentencia el 8 de julio, también solicitó cuatro años y cuatro meses de prisión para el periodista y empresa Valter Lavitola, exdirector de L’Avatia, acusado participar como intermediario en los sobornos que realizó Berlusconi en Panamá.
De acuerdo a AFP, el senador Sergio de Gregorio recibió tres millones de euros para que se pasara del partido Italia de los Valores (IDV) al Pueblo de la Libertad, agrupación del expresidente, para que así pudieran quitar del poder a su contrincante de centroizquierda, Romano Prodi, al perder las elecciones legislativas de 2006.
Esta acusación se da con base a la propia confesión de De Gregorio, quien explicó que recibió dos millones en efectivo, a través de varias consignaciones, y el resto a través del movimiento político Italianos en el Mundo, con presencia en Argentina, Brasil y Venezuela.
La defensa de “Il Cavaliere” argumenta que no se le puede acusar a nadie de sobornar a un legislador puesto que no están obligados a seguir las órdenes de su partido y pueden realizar la votación que quieran.
Silvio Berlusconi recientemente fue absuelto por el delito de prostitución y trata de menores, en el caso Rubi, por el mismo tribunal, pues la justicia italiana no encontró pruebas que comprobarán que el exmandatario estuviera consciente de que las asistentes a sus polémicas fiestas en la residencia oficial fueran menores de edad.
mahy