La fortuna del multimillonario Donald Trump, hoy presidente de Estados Unidos, está sustentada en dudosas transacciones fiscales y hasta en fraudes, irregularidades cometidas durante la década de los noventa del siglo pasado, según se desprende de una investigación realizada por The New York Times, dada a conocer hoy.
Así, al menos unos 413 millones de dólares provinieron del imperio inmobiliario de Fred Trump, quien transfirió a sus hijos más de mil millones de dólares. Por esta cantidad tendría que haber pagado al fisco unos 550 millones por concepto de regalos y herencias. Sin embargo, según los cálculos del diario, Fred y Mary Trump transfirieron a sus hijos una fortuna de más de mil millones de dólares, por la que apenas pagaron al fisco unos 52.3 millones.
Lo anterior lo afirma The New York Times tras su investigación, que realizó mediante entrevistas con antiguos colaboradores de Fred Trump y más de 10 mil páginas de documentos, como las declaraciones fiscales de él y de sus empresas.
Según se publicó, ya en los años noventa del siglo pasado, cuando Fred Trump ya se encontraba muy enfermo, Donald y sus hermanos crearon una empresa fantasma para ocultar transferencias millonarias para evitar el cobro de impuestos sobre la herencia.
Otro de los mecanismos utilizados para transferir sus bienes a sus familia pero evadiendo impuestos, fue declarar que sus propiedades tenían un valor mucho menor al real. Según el diario, los Trump declararon un valor muy por debajo del real diversos inmuebles, edificios que dijeron que valían 41.4 millones de dólares pero que posteriormente fueron vendidos en una cantidad 16 veces mayor.
También en 1992 fue creada una empresa que, mediante facturas infladas, fue utilizada para para transferir millones de dólares de Fred Trump hacia sus hijos y otros familiares.
Según informó el periódico, el presidente estadounidense se negó durante las últimas semanas a ofrecer comentarios acerca de esta investigación.
Sin embargo, a nombre de la familia, Robert Trump, hermano del presidente estadounidense, dijo que se habían presentado las declaraciones correspondientes, y uno de sus abogados, Charles J. Harder, aseguró que las acusaciones de fraude y evasión fiscal “son falsas al ciento por ciento”.
Además, “el presidente Trump prácticamente no tuvo ninguna participación en estos asuntos”, ya que delegó todos los asuntos fiscales a familiares y a profesionales.
Desde la campaña presidencial The New York Times ha insistido en cuestionar las prácticas fiscales de Donald Trump, un presidente que, a diferencia de sus antecesores, se ha negado a hacer públicas sus declaraciones de impuestos.
El periódico también aclaró que el holding Trump Organization es una empresa familiar que no cotiza en bolsa ni publica sus resultados.
Si bien es muy difícil que, por el tiempo transcurrido, Donald Trump enfrente un proceso penal por ayudar a sus padres en la evasión de impuestos, podría recibir multas civiles por fraude fiscal.
arm