El presidente Andrés Manuel López Obrador acusó falsamente a legisladores de Va por México de no querer legislar. Esto, ante la anunciada “moratoria constitucional” hecha por la alianza.
A varios días de que los legisladores de Va por México anunciaron que ya no aprobarían ninguna reforma constitucional enviada por el presidente, éste acusó en la conferencia mañanera que diputados y senadores de PRI, PAN y PRD ya “no van a legislar”.
Dijo que los opositores anunciaron “una huelga”, y que en vista de que no quieren trabajar, entonces deberían renunciar a su sueldo.
Sin embargo, lo que anunciaron los legisladores de oposición es que no aprobarían reformas constitucionales, debido a que las iniciativa de AMLO han probado ser destructivas para el país, pero aclararon que seguirían legislando en torno a múltiples iniciativas pendientes.
Acostumbrado a mentir y distorsionar la información, AMLO aseguró que Va por México ya no quiere trabajar en el Congreso de la Unión.
“Ahora que los diputados o dirigentes del bloque conservador dicen que va a haber una huelga, una moratoria, que no me van a aprobar ninguna iniciativa de reforma constitucional, imagínense, qué legisladores, ¿a quién perjudican? Al pueblo”, dijo en su acostumbrada retórica.
En seguida dijo que entonces mejor ya no se presenten ni al Senado ni a la Cámara de Diputados.
“Entonces, que ya no vayan, si no van a legislar, que no vayan a la Cámara de Diputados, que no vayan a la Cámara de Senadores. Nada más que no cobren”.
Agregó que “están declarando que no van a aprobar nada, nada de lo que nosotros vamos a proponer y resulta que el Ejecutivo, pues, tiene la facultad de presentar iniciativas de reformas”.
Y aunque es verdad que el jefe del Ejecutivo tiene la facultad de presentar iniciativas de ley y de reforma a la Constitución, ningún legislador tiene la obligación de votar a favor.
Según Va por México, en tres años de gobierno se ha demostrado que las reformas de AMLO afectan al país. Además, las próximas reformas ya se sabe que serán regresivas, ya que se trata de la reforma electoral, que pretende desmantelar al INE y la de la Guardia Nacional, que pretende adscribirla a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Ambas reformas son contrarias a las posturas de Va por México, por lo que anunciaron de manera anticipada que no las aprobarán.
Sin embargo, aclararon que el trabajo legislativo seguirá de manera normal.