El presidente Andrés Manuel López Obrador se pronunció contra el requisito de experiencia para participar en la elección de ministros, magistrados y jueces, y se manifestó a favor de que puedan participar recién egresados de Derecho porque traen “frescura” y no han perdido la “mística”.
En un episodio más del “humanismo mexicano” en su capítulo de “90 por ciento honestidad, 10 por ciento experiencia”, en su conferencia de prensa de este lunes el tabasqueño se manifestó contra la trayectoria que haga más probable un buen trabajo, y a favor de algo que vagamente llama “frescura e ideales” y “mística”.
Así, en ese sentido López Obrador se manifestó contra un aspecto de su propia iniciativa de reforma al Poder Judicial: “Se nos fue en la iniciativa que tienen que tener cinco años de experiencia los que puedan participar como jueces, magistrados, ministros. Yo he estado en contra de eso y, sin embargo, se nos pasó”.
Manifestó su fe en los novatos en las lides judiciales: “Yo soy más partidario de que una mujer, un hombre que se titula como abogado sale con mucho entusiasmo de hacer valer la ley. Está lleno de frescura, de ideales, de llevar a la práctica la máxima de que: al margen de la ley, nada, y por encima de la ley, nadie”.
Para redondear la idea, el macuspano se lanzó contra la experiencia y despreció el saber a favor de algo que llama “mística”: “Ya cuando va pasando el tiempo, y ya a los cinco años ya ni hablemos, porque antes casi en todos los requisitos están 10 años de experiencia. Ya a los 10 años ya saben, pero bastante, pero ya perdieron la mística, ya la fueron dejando en el camino; ya aprendieron otras cosas que no se necesitan”.
Con la simplonería que le caracteriza y que explica la razón de su designación de Lenia Batres como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y de muchos más de sus nombramientos en importantes cargos gubernamentales, López Obrador prosiguió: “Siempre dicen: ‘No, ¿y la experiencia?’. Pues si van a ser abogados titulados, y la escuela, pues. Y si hace falta un curso especial, se lleva a cabo sobre la función específica de un juez. ¿Qué, es muy compleja la impartición de justicia cuando se actúa con rectitud y no por consigna, como suele pasar?”.
Así es el hombre que dijo “no crean que tiene mucha ciencia el gobernar” y, antes, “no crean ustedes que es muchísima ciencia perforar un pozo de petróleo”.