En el país avanza y se consolida la militarización como una política de Estado, proceso iniciado en 2006, la que genera problemas como concentración del poder, politización, violaciones a derechos humanos y un mayor peso castrense sobre las decisiones gubernamentales, señala Integralia Consultores.
En el reporte La militarización en México. Hacia la consolidación de una política de Estado 2006-2022, Integralia Consultores detalla el avance de ese proceso que inició desde el gobierno de Felipe Calderón y que se ha profundizado notablemente en el de Andrés Manuel Lopez Obrador.
Entre las principales líneas de la militarización se señala en el documento a la Guardia Nacional, la que en realidad “ha sido una extensión material y operativa de las fuerzas armadas”, ya que la mayoría de sus integrantes tienen plaza o sueldo de la Sedena y de la Secretaría de Marina.
Otro indicador preocupante del crecimiento de la influencia castrense en el gobierno es que durante la administración de López Obrador las fuerzas armadas han asumido el control operativo y directivo de diversas funciones que antaño no tenían, como la construcción de infraestructura civil, la administración de aduanas marítimas y la operación de programas sociales.
Un dato que deja ver la militarización en pleno es el impresionante crecimiento de los recursos que se le han asignado a las fuerzas armadas entre 2007 y 2020, que ha sido de 60.5 por ciento en términos reales.
Pero Integralia Consultores señala que pese a ese crecimiento de funciones, responsabilidades y recursos de las fuerzas armadas, también se ha registrado un incremento en la incidencia de delitos como la extorsión, el narcomenudeo y el feminicidio.
El documento señala otro par de asuntos relevantes sobre el funcionamiento actual de las fuerzas armadas son las autoridades con más quejas por violaciones a derechos humanos, y la opacidad con la que desarrollan sus actividades.
Acerca de la profundización de la militarización en el actual gobierno, Integralia menciona que los esfuerzos de López Obrador apuntan “hacia la permanencia de las fuerzas armadas y la consolidación de la militarización de la Guardia Nacional y de las tareas de seguridad”.
Integralia Consultores señala que la militarización da lugar a diversos problemas, entre los que están el aumento del peso del Ejército en las decisiones gubernamentales y en el diseño y la ejecución de políticas públicas, concentración del poder, se desplaza la formación de policías locales y estatales, continuación de violaciones a los derechos humanos, una débil vigilancia y rendición de cuentas, además de que se pueden politizar y también adquirir una lógica empresarial.