La principal defensa de AMLO y su hijo José Ramón en el caso de la Casa Gris, el que no existió conflicto de interés y por ende, no hubo corrupción, ha quedado desarmada hoy, al revelarse la existencia de once contratos celebrados entre Baker Hughes y Pemex, a partir de que el hijo de AMLO se mudó a la residencia.
Una investigación de Verónica Ayala, de Mexicanos Contra la Corrupción, revela que Baker Hughes celebró con Pemex al menos once contratos a partir de que José Ramón habitó la residencia, propiedad de un ex directivo de la empresa norteamericana.
El reportaje abre diciendo que el mismo día en que José Ramón López Beltrán y su familia ocuparon la mansión conocida como “Casa Gris”, una filial de Baker Hughes firmó un contrato con una filial de Pemex en Houston.
“El 16 de agosto de 2019, José Ramón López Beltrán y su esposa Carolyn Adams ocuparon la llamada “Casa Gris” y ese mismo día, coincidentemente, una filial de Baker Hughes en Estados Unidos firmó un contrato con Pemex Procurement International (PPI) en su sede en Houston”, empresa dirigida por Carmelina Esquer, hija de Alejandro Esquer, secretario particular de AMLO.
Se recordará que la revelación sobre el opulento nivel de vida del hijo mayor de AMLO se hizo el 27 de enero de 2022. El contenido de aquel reportaje apuntaba a una fuerte probabilidad de que existiera un conflicto de interés, debido a que la Casa Gris es propiedad de Keith Schilling, que entonces era directivo de BH, con quien Pemex celebró contratos.
Luego del reportaje, tanto Pemex, como BH, como AMLO, negaron toda posibilidad de que existiera conflicto de interés y mucho menos corrupción.
A lo largo de 2022, MCCI se dio a la tarea de solicitar información sobre los contratos celebrados por Pemex, lo que logró hace unos meses.
Señala que se le entregaron los documentos de alrededor de 200 contratos.
De la revisión de los mismos se desprende que en agosto y octubre de 2019, luego de que la familia Beltrán Adams se mudara a la Casa Gris, Pemex le dio a BH siete contratos más, que con que dio el día de la mudanza, suman ocho contratos por 1 millón 94 mil dólares.
Y en seguida, menciona el punto que implica el conflicto de interés que siempre negaron los involucrados:
“La asignación y firma de los nuevos contratos se realizó en Estados Unidos, en los días en que el dueño de la “Casa Gris” era Keith Schilling, quien se desempeñaba como uno de los presidentes de Baker Hughes en Canadá y, a la par, como director comercial y de ventas en el área de Houston, donde está la sede de Pemex Internacional (PPI), según difundió el propio ejecutivo en su perfil de LinkedIn”.
Recuerda la investigación que, en febrero de 2022, BH negó que la división de su compañía que fue encabezada por Schilling, el dueño de la Casa Gris, hubiera tenido negocios con Pemex.
Según la empresa petrolera, había sido otra división la que celebró acuerdos con la paratestatal mexicana, la división dedicada a Latinoamérica, en tanto que Schilling siempre estuvo en la división para Norteamérica.
Pero, según descubrió MCCI, esto era mentira.
“Los nuevos documentos obtenidos por MCCI contradicen la versión de la empresa. En una revisión a más de 200 expedientes, se encontró que Pemex Internacional no sólo asignó y firmó contratos en 2019 con la división de Norteamérica de Baker Hughes, sino que también lo hizo en los años siguientes.
“En la revisión se identificó que entre 2019 y 2021, PPI firmó en Houston con Baker Hughes y sus filiales al menos 11 contratos por un monto que supera los 29 millones de dólares, que equivalen a cerca de 600 millones de pesos”.
*ofv