Se integró el Comité Técnico de Evaluación para el proceso de renovación de cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), en el que el oficialismo se volvió a imponer porque una mayoría de sus integrantes son militantes o simpatizantes del obradorismo.
Después de que ayer no fueron nombrados los tres miembros que corresponden a la Cámara de Diputados, hoy ese listado se completó con los designados por la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados, que son Enrique Galván Ochoa, Evangelina Hernández Duarte y Andrés Norberto García Repper Favila.
Ya antes habían sido nombrados María Esther Azuela Gómez y Sergio López Ayllón por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Transparencia y Protección de Datos Personales (INAI), y Araceli Mondragón González y Ernesto Isunza Vera por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
El oficialismo apoyó los nombramientos hechos por la Jucopo, mientras que PAN, PRI y PRD se abstuvieron y Movimiento Ciudadano se manifestó en contra. La falta de acuerdos para escoger a sus integrantes no es buen signo.
El presidente de la Jucopo, Ignacio Mier, dijo que el Comité Técnico de Evaluación tendrá plena autonomía para dar cumplimiento a las cuatro etapas de la convocatoria aprobada el martes pasado.
Sin embargo, por el dominio que ejerce Morena tanto en la CNDH como en la Cámara de Diputados, cuando menos cuatro de los integrantes del Comité Técnico de Evaluación tiene un claro perfil oficialista, ponen esa autonomía en duda.
En diciembre pasado la CNDH dio a conocer a las dos personas que la representarían en el órgano: una de ellas es Isunza Vera y la otra fue María del Socorro Puga Luévano. Pero el escándalo, uno más de esa comisión, fue que se reveló que esta no tenía credenciales académicas, y una de las más notables que podía presumir era una certificación en “yoga de la risa”. Ante el revuelo que causó el organismo encabezado por Rosario Piedra, Puga Luévano tuvo que ser sustituida.
El otro designado fue Isunza Vera, doctor en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid y profesor-investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) desde 1998 y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
Isunza Vera es un seguidor de López Obrador, como lo ha mostrado mucho tiempo en su perfil de Twitter, en el que ha bajado notablemente su participación en temas nacionales a partir de su nombramiento (por cierto: varios periodistas y articulistas no alineados con el gobierno mostraron su sorpresa cuando intentaron ver su cuenta y encontraron que el académico del CIESAS los había bloqueado). Allí se pueden apreciar su apoyo a los partidos de izquierda latinoamericanos y también a Podemos, por ejemplo, y su apoyo a las políticas del tabasqueño, entre ellas su embestida contra el INE, como, por ejemplo, su retuit a un video del propagandista gobiernista Álvaro Delgado contra la marcha del 14 de noviembre pasado en respaldo al organismo electoral. Asimismo, en redes sociales se mostraron capturas de pantalla de tuits en los que se observa la preferencia de Isunza Vera por las políticas de López Obrador y en contra de los partidos de oposición.
También se debe mencionar que esas designaciones fueron impugnadas por seis integrantes del Consejo Consultivo de la propia CNDH ya que fueron hechas “en total opacidad”, además de que señalaron que “es indispensable que las personas designadas cumplan con el perfil e imparcialidad político-partidista que esa alta responsabilidad demanda y de no ser así, la CNDH reemplace dichas designaciones por las personas idóneas”.
Otro de los que, sin duda, es un militante recalcitrante del obradorismo es Galván Ochoa, articulista de La Jornada (uno de los medios que ha recibido más dinero por publicidad del gobierno federal) y quien fue “constituyente moral” designado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, de quien es muy cercano. Apologista de Luis Echeverría, también ha participado muy activamente en la campaña contra el INE por sus “gastos excesivos”.
García Repper también muestra en su cuenta de Twitter su adicción por el presidente y su movimiento, así como su aversión por la oposición. Allí se puede ver que retuitea mensajes de personajes gobiernistas como, por ejemplo, Poncho Gutiérrez, El Fisgón, Julio Hernández López, Fabrizio Mejía y Jorge Gómez Naredo, entre otros. Fue uno de los ofendidos e indignados porque la ministra presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación no se haya parado a la entrada de López Obrador en el acto celebratorio de la Constitución, y ha sido un constante atacante de Lorenzo Córdova y Ciro Murayama.
Además, por si fuera poco, Movimiento Ciudadano mostró que García Repper fue, hasta hace apenas unos pocos meses, representante de Morena en el Consejo Local Electoral de Tamaulipas.
Sobre Mondragón González, en diciembre pasado el tuitero Pablo Arreola mostró un desplegado del 1 de junio de 2021 en el que un grupo de académicos llamaba a votar por Morena porque la disyuntiva, según ellos, era elegir entre el proyecto “neoliberal y oligárquico” de Claudio X. González y amigos, y el “de la Cuarta Transformación, que representa la esperanza probada y comprobada de México”. Entre las firmantes estaba la hoy integrante del Comité Técnico de Evaluación.
Así, con mayoría obradorista (y ya es muy sabido cómo practican el mayoriteo), inicia sus trabajos ese órgano que analizará a los aspirantes a ser consejeros del INE.