En la revisión de la cuenta pública 2023, la Auditoria Superior de la Federación (ASF) detectó diversas irregularidades que ascienden 2 mil 570 millones 668 mil 400 pesos en compras del sector salud, específicamente en lo referente a proveedores de la Secretaría de Salud, IMSS, ISSSTE y Birmex.
Las anomalías tienen que ver con compras a sobreprecio, contratos irregulares, participación en licitaciones de empresas inhabilitadas y servicios “fantasma”, es decir que no se llevaron a cabo, a pesar de haberse pagado.
Desde febrero pasado, la ASF dio a conocer los resultados de las auditorías practicadas a la SS, el IMSS, ISSSTE e IMSS Bienestar, pero al no ser solventadas las observaciones correspondientes, las irregularidades encontradas se consideran como un daño al erario.
De acuerdo con un reportaje de El Universal, el caso donde se encontraron los mayores quebrantos fue en la asignación de contratos por parte de la Secretaría de Salud a las empresas Red Corporativo SA de CV y Grupo Vanguardia en Información y Conocimiento SA de CV, para la formación y capacitación de recursos humanos. La anomalía consistió en que sus servicios fueron pagados a sobrecosto; el monto fue por 2 mil 566 millones.
En otro caso, la Secretaría de Salud incurrió en irregularidades por 188.4 millones de pesos por contratos a las empresas Comercializadora Arvien, Health Solutions, y Rebstock México, para la construcción del Centro Regional de Alta Especialidad en Chiapas, sin que existiera documentación probatoria.
La misma dependencia asignó contratos a la empresa Irkon Holdings para las obras de sustitución de la Torre de Hospitalización del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán. La ASF detectó desfalcos por 7 millones 90 mil pesos,por trabajos que se pagaron pero no se realizaron
En un caso más de corrupción encontrado en las revisiones de la ASF, Birmex incurrió en presuntos quebrantos por mil 44 millones 883 mil pesos en la compra consolidada de medicamentos. Se detectaron pagos irregulares por 819 millones 630 mil pesos a la empresa Almacenaje y distribución Avior y por 152 millones 553 mil pesos a Farmacéuticos Maypo. De ninguna de las dos transacciones de aportaron las evidencias documentales que acreditaran los servicios prestados.
En el caso del ISSSTE, se hallaron anomalías por 50 millones 384 mil 700 pesos. Se encontraron contratos a modo y adjudicaciones directas a la empresa Operbes por servicios para la red nacional de servicios de telecomunicaciones privadas. Asimismo, en los trabajos de sustitución del Hospital General Dr. Francisco Galindo en Torreón, Coahuila, la institución pagó un sobrecosto de 2 millones 517 mil 400 pesos a las empresas Constructora JILSA e Ingeniería y Desarrollo Inmobiliario de México.
Por lo que respecta al IMSS, se encontraron irregularidades por mil 225 millones de pesos que estarían destinados a la implementación del Servicio Médico Integral de Estudios de Laboratorio Clínico y de Anestesia. Los recursos en realidad se utilizaron para pagar deudas de otros años y costear otros programas, sin el soporte documental requerido. La ASF documentó que en el contrato por 6 millones 768 mil pesos asignado a la empresa Disamed, para compras de insumos, tampoco existía documentación probatoria.
Cabe recordar que el IMSS dejó participar en licitaciones a farmacéuticas que estaban inhabilitadas por siete años, siendo éstas Centrum Promotora, Disimed, Medicash e Impromed. Todas ellas fueron inhabilitadas por siete años por la Secretaría de la Función Pública en agosto de 2022 por evadir las reglas de licitación, prácticas monopólicas y ventas a sobreprecio. De igual manera, se les impuso una multa de 100 millones 243 mil pesos.
arg