Después de que el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, declaró durante la conferencia de prensa presidencial que los cruces de migrantes en la frontera con Estados Unidos se han reducido en 74.5 por ciento, el diputado Porfirio Muñoz Ledo calificó el hecho como “un horror”, una “confesión penosa”.
La mañana de hoy Ebrard dijo que los cruces de migrantes en la frontera con Estados Unidos ha disminuido en 74.5 por ciento. Subrayó que “de manera coincidente, “se redujeron los rescates a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM)”.
También recalcó que la inversión de México en el Plan de Desarrollo Integral que presentó la Cepal para Centroamérica “ya muestra algunos de sus primeros resultados, especialmente en el caso de El Salvador, donde a esta fecha hay 6 mil 61 personas dentro de este programa. La meta es llegar a 20 mil, lo cual significa que México sería el único país que otorga semejante número de empleos a las personas que tienen que emigrar por condiciones de pobreza. Esto no lo está haciendo ningún otro país del mundo”.
Después de dar cifras de atención a migrantes, el canciller afirmó que “hoy tenemos resultados positivos, no sólo por cuanto a que se está reduciendo el flujo de personas que es irregular, que ese es el objetivo principal, quiero subrayar esto. Nuestro propósito es que las personas que están en territorio nacional lo estén de acuerdo a las formas previstas en la ley mexicana; por ejemplo, el refugio. El refugio ha crecido mucho; México es un país que otorga refugio a las personas que lo solicitan. Es de los países que tienen la proporción porcentual más alta de otorgamiento de refugio frente a solicitudes de refugio (sic)”.
En confrontación con las afirmaciones de Ebrard, Muñoz Ledo dijo, a la salida de un desayuno de diputados con el presidente Andrés Manuel López Obrador, lo siguiente cuando fue cuestionado acerca de ellas: “Un horror, es un horror. Está confesando que la factura que se cobró es muy alta. Me parece que es una declaración casi injuriosa para el país que anuncie que el 74 por ciento de la migración bajó cuando todos los países de América Latina, sin excepción, tienen circulación libre de personas”.
“Entonces tú puedes ir caminando desde la Patagonia hasta la frontera de México sin presentar pasaporte”, pero, al contrario de esa situación, en México hay “un tapón que nos hace la cola de Estados Unidos, en vez de ser la cabeza de América Latina. Ese tapón tiene que abrirse; nosotros somos el país del sur que tiene la responsabilidad de proveer a todos los latinoamericanos”.
El legislador dijo que el tema migratorio no fue abordador en la reunión con el presidente, quien “dijo de nuevo que la libertad no se implora, sino se conquista. Yo lo conozco muy bien, estoy convencido, nos lo dijo, la cordialidad con que nos saludamos. Estoy haciendo un servicio a la República porque nadie dice las cosas como son: éste es un favor que se le está haciendo, del no más claro, al señor Trump”.
Al referirse al dicho de Ebrard sobre el respeto a los derechos humanos, Muñoz Ledo expresó que “no es cierto. Tienen que probarlo. Hablan de otros retenes que son menos conflictivos, claro, pero la política es la misma: retenerlos, no dejarlos que vayan para arriba. Es un compromiso”.
Cuando se le insistió si la caída en el índice de migración es una vergüenza, Muñoz Ledo respondió: “No es una vergüenza: es vergonzoso; no es un título de orgullo sino una confesión penosa”.
El legislador insistió en sus críticas a Francisco Garduño, director del INM, un instituto que “estaba en manos de gente independiente, pero lo corrieron, lo hicieron renunciar y metieron a un hombre que no es ni siquiera es culto”.
Ayer Muñoz ledo presentó en la Cámara de Diputados su iniciativa de reforma al artículo 11 constitucional, en la que pugna por el libre tránsito por el territorio nacional. De su partido, Morena, sólo recibió el apoyo de una diputada.