Se alistan detalles para que Rosario Piedra Ibarra, la muy cuestionada presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), sea reelecta en su cargo pese a ser la peor calificada entre los 15 semifinalistas, de falsificar una carta y de crear división en la propia bancada de Morena en la Cámara de Senadores.
La mañana de este martes el senador Saúl Monreal dijo que el grupo parlamentario de Morena en la cámara alta está analizando las tres candidaturas para ocupar la presidencia del organismo de derechos humanos con el propósito de que los senadores “vayamos en unidad”.
Pero advirtió claramente: “La mayoría no ve mal la reelección, que estamos en espera, que vamos a trabajarla, que se está analizando ahorita entre todos los senadores” para ir en unidad, lo que incluye a los legisladores de sus partidos satélite para alcanzar la mayoría calificada que se requiere para la designación.
Sobre la carta de recomendación falsa que presentó Piedra Ibarra a nombre de Raúl Vera, obispo de Saltillo, Monreal dijo que eso se está investigando, pero que la misiva, “al menos de parte de nosotros los senadores, no se presentó”, pero que el asunto se va a aclarar.
A su vez, José Gerardo Rodolfo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, afirmó: “Estamos valorando muy seriamente la reelección de Rosario Piedra”, y dio su opinión sobre la actual presidenta de la CNDH: “Mi posición es que es una compañera comprometida. Es una compañera que ha sufrido el acoso de organizaciones de derecha durísimo, en este momento. Yo estoy convencido”.
Acerca de la carta que Piedra Ibarra falsificó para apuntalar su postulación, Fernández Noroña pretextó que “ella se deslindó: dijo que lo hizo de buena fe”.
Por su parte, además de fuertes críticas en la Comisión de Derechos Humanos del Senado, los grupos parlamentarios del PRI, del PAN y de Movimiento Ciudadano han anunciado que votarán contra el continuismo de Piedra Ibarra al frente de la CNDH.