Ramón Castro y Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), respondió al presidente López Obrador que la Iglesia no se ha quedado callada ante las situaciones de inseguridad en gobiernos anteriores, por lo que negó que sean “hipócritas”. Además, llamó al gobierno a combatir la violencia con la ley, a quitar prejuicios y a entablar diálogo.
Este jueves, durante su conferencia de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó un ataque contra la Iglesia por la demanda que un cura hizo, tras el asesinato de dos sacerdotes jesuitas, de cambiar la estrategia de seguridad. Por ello los acusó de callar ante las masacres en el sexenio de Felipe Calderón, les cuestionó si quieren una solución violenta y “apostar a una guerra”, por lo cual los tildó de hipócritas. También denunció una supuesta simpatía de ellos con “partidos conservadores”.
En entrevista concedida a Joaquín López Dóriga para Radio Fórmula, Castro y Castro, quien se manifestó sorprendido por las declaraciones de López Obrador, rechazó las acusaciones y recordó que la Iglesia no ha guardado silencio frente a situaciones como las actuales: “Quisiera, con todo respeto, informar y recordar: no ha habido un periodo en que la Iglesia no haya criticado, no haya analizado, no haya invitado. Desde los sexenios últimos podemos afirmar, presentando los documentos que se han presentado, que se han publicado, en donde se hace un análisis de la realidad y donde se invita a la autoridad a reflexionar. Jamás nos hemos quedado callados. Sería faltar a la dimensión profética que tenemos como pastores (…) Jamás hemos callado, jamás hecho a un lado nuestro deber”.
Dijo que está recopilando los documentos respectivos, y agregó: “Hubo uno hace cinco o seis años, en donde todo el Episcopado decía: ‘¡Ya basta! Basta de todo lo que está sucediendo en corrupción, en violencia, en crímenes’. En cada momento más importante se hizo una manifestación pública de lo que creemos es parte de nuestra misión”.
“Últimamente está el proyecto general de pastoral que en su primera parte hace un análisis profundo y realista, para mí uno de los más fuertes y claros, de lo que está viviendo México, con una autocrítica a la misma Iglesia. Hace cinco años que se publicó, y allí está también haciéndose una denuncia a las autoridades del momento”, añadió.
Afirmó, contundente: “Entonces, con todo respeto: no somos hipócritas y no hemos callado cuando hemos tenido que hablar”.
Sobre el cuestionamiento de López Obrador de si los sacerdotes quieren combatir la violencia con la violencia, Castro y Castro respondió que no es así, y dijo una frase que le repugna al presidente: “La ley es la ley”.
“No queremos agregar violencia a la violencia. Lo que nosotros hemos propuesto es, prácticamente, que se aplique la ley. Hay una ley, hay un Estado de derecho, y eso nos puede ayudar muchísimo. No podemos hacer la ley a un lado, o aplicarla según nuestra conveniencia y nuestros intereses. La ley es la ley, y está allí para ayudar, para alcanzar precisamente la paz y la justicia. Entonces, no creo que sea cuestión de violencia por violencia, ni que se asesine a todos los delincuentes, absolutamente. Somos todos personas, hijos de Dios, pero para eso está el Estado de derecho y la ley”.
La respuesta sobre los vínculos de los sacerdotes con partidos, Castro y Castro dio una respuesta sobre la neutralidad de la Iglesia y de la condición ciudadana de los párrocos: “De ninguna manera hemos actuado de una manera hipócrita, ni tampoco hemos valorado o apoyado, y es una característica de la Iglesia ser siempre neutrales como Episcopado respecto a ciertos partidos. Que alguna persona como sacerdote tenga su preferencia, yo creo que es normal, y que es justo que alguien tenga el deseo de votar por tal o cual partido: para eso somos ciudadanos. Pero siempre hemos tenido, en la Conferencia Episcopal, el cuidado de jamás hacer una preferencia o de manifestar un deseo especial por tal o cual partido”.
Castro y Castro llamó al gobierno a “quitar prejuicios. Esos son prejuicios, falta de información, y si pudiéramos establecer puentes para que se pudieran aclarar esas afirmaciones, lo haríamos con todo el gusto, y trataríamos de publicar la posición de la Iglesia, que siempre ha sido defender la paz a través de la verdad y la justicia”.
Finalmente, preguntado por López Dóriga sobre un enfrentamiento de este tamaño, el secretario general de la CEM respondió: “No tengo de memoria en los últimos años algo así. Verdaderamente es algo que nos sorprende porque nosotros no hemos iniciado ningún enfrentamiento; al contrario, hemos ofrecido colaboración y diálogo. Entonces sí duele, pero estamos en la mejor disposición de que haya una aclaración y de que haya un diálogo en beneficio de todo el país y de la paz”.