La senadora Xóchitl Gálvez defendió la legalidad de la compra de su casa, retó a los morenistas a demolerla, afirmó que la orquesta encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador está apanicada por su avance en las encuestas y acuso de actos de corrupción a Víctor Hugo Romo, quien era delegado cuando se realizó la obra y no la clausuró.
En una intensa conferencia de prensa realizada en el Senado de la República, la virtual candidata presidencial por el Frente Amplio por México enfrentó preguntas sobre las acusaciones de Romo y del Morena capitalino acerca de su casa, la que esta organización ha llamado a las autoridades a “demolerla”.
Al respecto, Gálvez respondió a una pregunta de Andrea Becerril, de La Jornada, sobre si existe conflicto de interés (la reportera desconoce que este no es un tema moral sino legal) al haber entregado la manifestación cuando era delegada. Dijo que el asunto de su casa está dentro de la ley, y que un notario revisó los documentos para hacer el régimen de condominio, como el certificado de uso de suelo y la manifestación de obra, lo que también hizo el banco que le otorgó el crédito para la adquisición de su casa, el que “no va a poner en riesgo un recurso que te presta si hay alguna ilegalidad en la obra”.
Agregó que también el Registro Público de la Propiedad inscribió la casa, y este no es afín a ella porque ya fue en el gobierno de Morena en la ciudad.
Entonces dijo a los morenistas que “la ley sí es la ley para mí, y yo los reto a que me la demuelan”, en referencia a su casa.
Además, dijo que la terminación de la obra se le notificó a la delegación Miguel Hidalgo, entonces encabezada por Romo. “Yo sólo compré; yo no soy la constructora ni mucho menos. Yo compré en preventa esta casa”.
Gálvez dijo que Romo debe demostrar que la manifestación es ilegal. Dijo que en ese predio “se podían hacer 13 unidades habitacionales y se hicieron cinco, y está dentro de la ley”.
Sobre Romo, cuyo video ha servido de inspiración para los propagandistas de López Obrador, dijo que él era delegado cuando se construyó el conjunto habitacional en el que vive, que “a él se le entregó la terminación de obra. ¿Por qué si era ilegal no la clausuró? Él era el delegado cuando se construyó la casa”.
Abundó sobre Romo al responder al reportero de Canal Once: “Usted le notifica a la alcaldía la terminación de obra, y eso sí existe. La arquitecta que la construyó le notificó a la alcaldía de Víctor Hugo Romo la terminación de obra; si la alcaldía no fue (que, por cierto, sí fue) y no clausuró, pues fue porque no encontró ninguna anomalía. Pero la alcaldía fue a revisar”.
Continuó con su aclaración: “Lo que requiere la ley es aviso de terminación y eso está. Hasta ahí. Para escriturar es lo que te piden: que la constructora avise que terminó la obra. La alcaldía tiene la obligación de ir a revisar; el señor Romo no lo hizo. ¿Sabe por qué? Porque pedía moches para entregar esas terminaciones”.
Al reportero de Canal Once Gálvez respondió son severidad: “A mí demuéstreme que yo autoricé, como Romo en Minería 88, en donde autorizó 33 departamentos cuando debían de ser 14. Ahí sí hay un problema. Donde vivía David Razú, su director general de Gobierno. Y autorizó Monte Camerún 50, en las Lomas de Chapultepec, donde se hicieron ocho niveles donde se podían dar tres (y ahí sí les dio terminación de obra, por cierto). Esos dos le invito a que los vaya a revisar”.
Sobre el precio de su casa, la hidalguense volvió a desmentir a Romo en otra respuesta: “Yo la compré en preventa, y usted revise el plazo cuando yo la compré; me la entregaron tres años después y hubo inflación: los aceros se fueron al cielo, la gente le subió el precio y siempre las compras en preventa son más baratas. Tan están caras que no se han vendido. Eso el avalúo lo hace un notario público y yo pagué de acuerdo al avalúo”.
Por ello, insistió, “la casa es legal, la compré a un precio legal, la compré con un crédito bancario, y el banco hace un avalúo propio”.
Gálvez acusó: “Romo es un bandido, y todo México lo sabe. Dejó el parque El Mexicanito a la mitad; allí está una denuncia en la Fiscalía. Ojalá la Fiscalía le dé seguimiento. Hay un dictamen de la Contraloría, de la Función Pública, donde se acredita un quebranto de 6 millones de pesos en el parque El Mexicanito y está puesta la denuncia. Pagó el mercado Escandón, por 40 millones de pesos, sin que estuviera construido. Allí hay una sentencia a su director general de Obras donde lo obligan a pagar 38 millones de pesos. No sé si después le perdonaron la vida porque, como tienen a modo la Fiscalía, pues quizá”.
Así, Gálvez señaló que el fraccionamiento donde vive es legal, al igual que la adquisición de su casa, además de que no hay conflicto de interés porque el uso de suelo es legal. Remató al negar que sus empresas hayan recibido algún tipo de contrato de la constructora que hizo la casa en la que vive.
Sobre el comunicado de Morena, dijo que revelar su domicilio la pone en riesgo, por lo que teme por su seguridad y la de su familia, situación de la que responsabilizó al presidente López Obrador.
“Saben que estamos subiendo en las encuestas, y eso los tiene muertos de miedo. Ya me mandaron a todos sus voceros, a los gobernadores, al de Oaxaca, al de Sonora, y me van a echar montón. Eso sólo demuestra que la orquesta de la 4T es dirigida desde Palacio Nacional. Hoy el presidente me vuelve a mencionar en la mañanera. Ya sabe que tiene una restricción, y él es el que está operando esta orquesta porque es real: esta es una elección de Estado. Lo que está en juego es el poder y el presidente se va a imponer a como dé lugar”, explicó la senadora.
Comentó que hay que “decir que las dictaduras empiezan por quitarles su hogar a los opositores. Si no, pregúntenle a Daniel Ortega, que hace unos días le quitó a la escritora Gioconda Belli su casa. Y pues estoy segura de que si me tiran mi casa, millones de mexicanos me van a abrir la suya”.
Gálvez finalizó: “Me parece increíble que se apaniquen tanto con las encuestas. ¿Por qué no hablamos de la responsabilidad de Claudia Sheinbaum en el Colegio Rébsamen? Ahí sí su ineptitud mató a 26 personas porque el Programa de Protección Civil depende de la delegación, y en dos años como delegada no clausuró ese colegio. ¿Por qué no hablamos del Metro, que se murieron 26 personas por ineptos, porque no le dieron mantenimiento? Ah, ahí sí el gobierno no ve, ¿verdad? Y se está fijando en una casa de clase media que tengo con qué comprar y acreditar cómo la compré. Ese es el patrimonio de 30 años de trabajo”.