Campañas manchadas por acoso sexual y violaciones

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Los especialistas afirman que un menor que sufre abuso sexual o violación tarda un promedio de 20 años para poder hablar de su agresión, por eso cuando un joven denuncia este tipo de delitos, la responsabilidad de la autoridad es actuar de inmediato para impedir que haya impunidad.

Cuando el acusado es un personaje público como el diputado de Morena, Saúl Huerta, la actuación de la autoridad debe ser implacable, contundente, sin  influyentismos, ni sesgos políticos, aplicando la ley, por desgracia en este caso estamos viendo es otra cosa.

Tuve la oportunidad de escuchar al diputado en la entrevista que se transmitió en el programa de Ciro Gómez Leyva, un relato donde el acusado no sólo negó la agresión, sino que además intentó demeritar la credibilidad del menor y su familia, como con frecuencia ocurre con el perfil de los agresores.

Por eso, no debemos perder de vista lo importante, Saúl Huerta está acusado por un menor de abusar sexualmente de él. Así de sencillo, pero también así de delicado, no hay ningún ardid político contra él o su partido, la víctima no es él como nos quiere hacer parecer

Lo que tampoco vemos es a una jefa de gobierno indignada por la víctima, ni a Ernestina Godoy, la Fiscal de la Ciudad actuando en defensa del menor, él como en el caso de las agresiones contra mujeres es cuestionado, atacado, amenazado y ahora su palabra es puesta en duda.

Nosotras las mujeres sí te creemos porque sabemos que uno de cada seis niños sufre una violación antes de los 18 años y que la tasa de impunidad es del 99%, esto se debe a que sólo 10% de las y los menores atacados denuncia y de ella cifra, apenas el 1% llega a condena.

El tema no es nuevo, lo vemos en las familias y en diversos espacios, por desgracia la cifra negra y desinformación que existe es poca debido al temor, vergüenza y ocultamiento que existe desde casa.

Sabíamos que el proceso electoral de este año sería diferente por la presencia de la pandemia de covid-19, y esperábamos que la violencia política estuviera presente, lo que no imaginamos era que uno de los rasgos de las campañas de este año fuera que sus protagonistas, los candidatos, los que piden el voto y la confianza ciudadana, estuvieran involucrados en acusaciones sobre violaciones y acoso sexual.

No cabe duda que los tiempos han cambiado y que ahora cualquier violador o acosador puede tener la intención de acceder al poder, y tener como cómplice a la autoridad, por eso la importancia de votar el próximo 6 de junio reflexionando quien merece la confianza de representarnos y por ende nuestro voto.

 

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