El nuevo director de Birmex llegó dispuesto a transformar la empresa paraestatal mexicana, cuyo objetivo es producir vacunas y productos biológicos. Quiere que de verdad sirva. Es un objetivo loable por parte de Pedro Zenteno Santaella. Sin embargo, para lograrlo trae pugnas internas y externas, que parecen de todo, menos construir hacia dónde quiere ir
ROMPE CON INSABI Y QUIERE SER DISTRIBUIDOR
Siendo el tercer director de Birmex en lo que va del sexenio obradorista, Zenteno Santaella (quien sustituyó a David León después del videoescándalo) ha agarrado parejo contra todos. Contra el Insabi, dirigido por Juan Ferrer, al cual ya dejó sin distribución de medicamentos. Allá el Insabi que se rasque con sus propios distribuidores (de por sí es un instituto disminuido).
También la agarró contra los distribuidores privados, quienes han sido los enemigos a vencer por el actual gobierno obradorista, pero con pocos resultados. Y… ¿Birmex, que es fabricante de vacunas y biotecnológicos, debería estar en distribución?
Para el nuevo director de Birmex la distribución es una prioridad. ¿De verdad la distribución de medicamentos debe ser una actividad estratégica del Estado mexicano?
Por lo pronto, Zenteno ya le pidió a Hacienda un presupuesto de cuatro mil millones de pesos para sus centros de distribución. Se trataría de tener cuatro centros de distribución en todo el país para llevar las medicinas. Pero, sinceramente, la distribución la podría llevar adelante el sector privado bajos reglas de competencia y transparencia. Y de manera más eficiente.
LA AGARRA CONTRA SANOFI, ¿EN VACUNAS?
Ahora, el nuevo director de Birmex también va contra su socio estratégico, el laboratorio francés Sanofi, que hasta la fecha es la actividad con mejores resultados para Birmex. Cada año, México cuenta con más de 30 millones de dosis para la vacuna de influenza estacional. Y, por cierto, el año pasado la demanda por esa vacuna se desbordó porque todo se lo llevó el sector público (léase López-Gatell).
Incluso, Sanofi dio a conocer que había pedido para México un 10% más de vacunas, para que llegaran a 36 millones de dosis, dado que los pedidos se hacen desde febrero, cuando la Organización Mundial de la Salud da a conocer las cepas estacionales que vendrán ese año.
Zenteno ya la tomó contra su socio Sanofi. Ya hasta dijo que con ellos trae un contrato leonino, que sólo favorece al laboratorio francés.
El contrato entre Birmex y Sanofi ha logrado crear “Azteca Vacunas y Suministrador de Vacunas”. Es una APP (Asociación Público-Privada) y cada año surte las vacunas contra la influenza estacional y el combo hexavalente pediátrica. Están construyendo la planta de Cuautitlán Izcalli.
De seguro las intenciones de Zenteno en Birmex son positivas, pero quiere ser distribuidor sustituyendo a privados (algo costoso que no sabemos si deba ser lo estratégico para el Estado mexicano) y encuentra rencillas donde sí podría traer tecnología para vacunas, que es con sus socios tecnológicos. Historias de la 4T.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 05 de abril de 2021. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.