La jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT) envía diariamente la recaudación al presidente López Obrador. Las cuentas del equipo gobernante sobre las contribuciones son nítidas: los grandes contribuyentes son los que verdaderamente deben pagar impuestos.
Sólo el 3% de los contribuyentes, que son grandes corporativos o personas físicas con elevadísimos ingresos, aportan hasta el 70% de la recaudación fiscal. Ya vimos a Walmart, América Móvil, FEMSA e IBM, entre otros, pagar impuestos que debían desde hace años. Y en este trimestre hubo una persona física que pagó al SAT la friolera de seis mil millones de pesos. Por ellos van.
En cambio, el grueso de los contribuyentes, sobre todo los de la clase media, tienen una aportación mucho menor al fisco. Las personas físicas y el pequeño contribuyente apenas aportan el tres por ciento de la recaudación.
Por eso, Raquel Buenrostro, la jefa del SAT, avalada por el presidente López Obrador, tomó la decisión de dar una ampliación en el pago de la declaración anual para las personas físicas y pequeños contribuyentes.
Durante 2020, en plena pandemia, la prórroga para pagar al fisco fue de tres meses. Ahora, en el 2021, si bien continuamos con la pandemia, pero con apertura de actividades económicas, se dan dos meses para realizar la declaración anual, que por cierto, muchos la pagan lo antes posible para recibir su devolución de impuestos.
DIFÍCIL PAGAR AL FISCO
Buenrostro ve lo difícil que es pagar impuestos. Por eso la jefa del SAT propuso en la nueva reforma fiscal una simplificación de trámites. Para pagar impuestos se necesitan clases de maestría en contabilidad, o por lo menos pasarte días para tratar de pagarlos, o de plano pagarle a un contador. Lo que el SAT buscará es simplificar trámites, simplificar tarifas y fracciones arancelarias y que se pague en línea. Es decir, hacerle la vida más sencilla al contribuyente.
CONTRABANDO DE COMBUSTIBLES COSTÓ 20 MIL MILLONES DE PESOS
Mientras tanto, el reto del SAT por delante, es atacar el contrabando de combustible. Aquí no es el huachicol que le roban a Pemex. Es la entrada de combustibles, sobre todo de gasolina y diésel de Texas, sin pagar impuestos.
Son tantas fracciones arancelarias que los delincuentes burlan a las autoridades.
Ésta es la razón por la que en el norte vemos gasolinerías vendiendo mucho más barato que el resto del país.
Son mafias establecidas. En el SAT distinguen dos tipos de contrabando. Primero, el técnico, que es cuando le agregan unas pequeñas gotas al diésel y lo hacen pasar por otro combustible. Y, segundo, el contrabando bronco, que de plano no declara. Calcula un hueco fiscal, tan sólo en el primer trimestre de 20 mil millones de pesos por contrabando de combustible.
Buenrostro es eficiente. Busca ventanas de oportunidad y avisándole al Presidente va tanto por la simplificación de trámites como por el combate al contrabando de combustible, donde al igual que los grandes contribuyentes puede traer grandes ingresos al fisco.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 08 de abril de 2021. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.