Luego de seis días, Carmen Aristegui habló pero no opinió de la llamada boda fifí entre César Yáñez y Dulce Silva, así como la aparición del evento en la revista ¡Hola!
Fue hasta este viernes 5 de octubre, cuando Aristegui Flores en 5 minutos con 17 segundos, se pronunció sobre el tema, aunque, en realidad, sólo lanzó preguntas al aire, leyó fragmentos de una nota de la BBC Mundo y señaló, incluso, su trascendencia en medios internacionales como el periódico británico The Guardian, al cual recurre de vez en vez cuando de crítica se trata hacía otro funcionario público, casi siempre Enrique Peña Nieto.
“Han incrementado las críticas”, “En redes sociales pues la portada se comparó con varias donde aparece Angélica Rivera”, “En las redes hay un vuelo tremendo del asunto, por supuesto opiniones críticas”, “La prensa internacional también se está deteniendo estos días en el tema”, fueron algunas de las frases que pronunció la periodista sin cuestionar la incongruencia, como decenas de periodistas y medios lo hicieron durante los pasados seis días, respecto al discurso de austeridad y buen ejemplo que desde meses atrás ha alentado el presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Carmen Aristegui no pronunció su tan recurrida frase “¿Qué hay detrás de todo esto?”, tampoco cuestionó lo servido en la cena, que López Obrador haya sido su padrino, la contratación de los Ángeles Azules, o algún otro elemento. En su lugar, echó al aire estas preguntas que, a su vez, ella misma respondía.
“¿Tiene derecho la gente a casarse y festejar como quiera? Sí, sí tienen derecho. ¿Están expuestos mayormente los personajes públicos aún en su vida privada? Sí, eso también es cierto. ¿Tiene derecho la sociedad mexicana a contrastar lo que significa una boda con estas dimensiones con lo que es el mensaje de austeridad? Sí, sí tiene derecho la sociedad. Así que todo a la mesa, hablemos pues de la boda y su significado (aunque no dijo más)”.
El trato informativo que dio Carmen Aristegui a esta polémica fue muy diferente al que en años pasados dio a la boda de Enrique Peña Nieto y Angélica Rivera. De hecho, seis años después de la misa, junto con Proceso publicó un llamado “reportaje especial”, basado en revistas del corazón, para hablar de un presunto “expediente secreto”.
El 5 de febrero de 2016, como quien anuncia algo espectacular, ambos medios informaron en sus portales y redes sociales que revelarían el “expediente secreto” del matrimonio eclesiástico entre Peña Nieto y Rivera. Tanto fue el show mediático que las redes sociales mantuvieron en tendencia el tema.
Al día siguiente, puesto en línea el texto, su único soporte informativo eran documentos antes publicados por las revistas ¡Hola! y Quién. Sin embargo, la atención mediática fue extensa. El portal de la periodista, por ejemplo, tiene una sección especial del tema además de interactivos.
Dos años después, con la boda del hombre más cercano a Andrés Manuel López Obrador apenas emite un comentario de poco más de cinco minutos, seis días después del fastuoso evento y las miles de críticas que vinieron con él.