Jesús Seade después de haber negociado el T-MEC fue el candidato del gobierno de López Obrador para presidir la Organización Mundial de Comercio. Sin embargo, el organismo internacional, con sede en Ginebra, Suiza, no lo eligió. Es la tercera vez que México trata de presidir la OMC, y no le resulta. Primero, fue con Carlos Salinas de Gortari. Después con Herminio Blanco. Y ahora con Jesús Seade.
El problema para el regreso de Seade a México es que su subsecretaría, la de América del Norte, ya desapareció con los recortes presupuestales.
Jesús Seade, quien tiene todo el respaldo del presidente López Obrador, quería utilizar sus relaciones con la administración Trump (en particular con su amigo Bob, Robert Lighthizer, representante comercial de la Casa Blanca), para destrabar los problemas con la Organización Mundial de Comercio. Pero no pudo convencerlos en Suiza.
Ahora, toda la operación de implementación del acuerdo comercial lo están haciendo bien en Economía, Graciela Márquez y Luz María de la Mora.
Economía cubre los aspectos comerciales, y todos los demás temas, los cubre el propio Marcelo Ebrard, a quien ya hemos visto operar con la Casa Blanca.
De ahí que Seade suene más para una embajada. ¿En Asia? Podría ser. Su familia se encuentra en Hong Kong, y él tiene relaciones académicas allá.
Jesús Seade tuvo que negociar la última, y más difícil parte del T-MEC, en donde el acuerdo se aprobó, pero a cambio se cedió en reglas de origen del sector automotriz, acero y aluminio. El acuerdo comercial es un hecho. Y Seade tiene el respaldo del presidente López Obrador. Pronto sabremos dónde queda, quien en los hechos fue el tercer candidato mexicano para presidir la OMC.
LA DECISIÓN DE VW
Volkswagen México tomó la decisión de inmediato e hizo bien: romper con la concesionaria de Coyoacán, que en una de su área administrativa, como parte de las fotos históricas del sedán emblemático, tenía la foto del primer VW Sedán Tipo 1 de fábrica, el que encargó Hitler a Ferdinand Porsche. La foto con esvásticas, es inadmisible. Representa el holocausto, el asesinato de millones de personas y el racismo.
Sin embargo lo que sucedió después, en la agencia de autos, llamó la atención.
Cerca de 200 trabajadores de dicha agencia que están por perder su empleo, decidieron hacer un video, hablando de solidaridad, de que ellos repudian el odio y el racismo. Y sí, de que fue un error mostrar esa fotografía.
La distribuidora de VW Coyoacán, ya había sacado un boletín pidiendo “sus mayores disculpas”.
La empresa Volkswagen reaccionó bien. Con determinación. Igual lo hizo la embajada alemana, que reprobó la fotografía. Pero el tema no es que se quede en una fotografía, sino en el conocimiento de las personas que trabajan en esa distribuidora, y en VW en general, de los horrores de los millones de muertes que originó el nazismo. Pero que también se salven puestos de trabajo.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 18 de septiembre de 2020. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.