Las ocurrencias han sido el sello del gobierno de la 4T para gestionar la pandemia de COVID-19 y por lo que estamos viendo también lo serán para el programa de vacunación. Eso, sin contar el uso electoral que le están dando tanto las autoridades como el partido en el poder.
Cuando los y las mexicanas teníamos la esperanza de que la vacuna era una luz para contener al virus, nos topamos con la realidad de autoridades que están dando sesgos electorales, sin cumplir las metas planteadas para el primer mes del año, sin priorizar a los grupos más vulnerables y ahora, hasta sin vacunas.
Esta semana nos enteramos que la vacunación prácticamente será suspendida debido a que Pfizer dejará de hacer envíos durante tres semanas. Con este anuncio no se cumplirá la meta de inmunizar al primer millón de hombres y mujeres pues a la fecha no se ha aplicado ni a medio millón del personal médico.
Además, hemos visto abusos por parte de médicos, funcionarios y autoridades de la 4T, como sucedió el fin de semana con la alcaldesa de Acapulco, quien no conforme con ser vacunada, lo difundió en sus redes sociales.
Otro tema que preocupa es que no hay ni seriedad ni una estrategia clara en la que se dé prioridad a los grupos que más se contagian y mueren. Me refiero a quienes van de 35 a 60 años de edad, que es la población más vulnerable.
Por si todo esto no fuera suficiente motivo para estar preocupadas y preocupados, la conformación de las brigadas de vacunación donde irá el ejército político-electoral que tiene el gobierno desplegado en el país, ya comenzó a hacer presencia en los hospitales, para supervisar la aplicación de la vacuna.
Esos operadores serán vacunados por órdenes del titular del Ejecutivo Federal, poniéndolos por encima de médicos privados, maestros y grupos vulnerables, lo que nos habla de dónde tiene sus prioridades la 4T.
Sabemos que la contienda electoral que tendremos a mediados de año es un termómetro para saber el respaldo que tiene el gobierno, por ello en el PRD hemos denunciado el uso electoral que se quiere dar a la vacuna y los spots que el partido en el gobierno tiene al aire.
La apuesta de la 4T es obtener beneficios del plan de vacunación. Está visto que encontraron forma de sacar provecho de una tragedia mundial. Es por eso condenamos la actuación que tiene el grupo que hoy gobierna.
No vamos a permitir que se lucre con la salud de la gente, ni que se condicione la vacunación.
Al partido y al gobierno se le olvida que la gente cada día está más informada y, que al paso que vamos, quedará demostrado que este gobierno sólo se burló de la esperanza de la población.