- En cuatro meses se gastarán dos mil 659 millones 893 mil 280 pesos
- Televisa y Azteca, Reforma y El Universal, donde más ha gastado el gobierno. Proceso continúa a la saga
- La agencia de Olabuenaga también ha recibido cuantiosos recursos
- Los medios públicos, relegados
En los primeros ocho meses de administración, el gobierno federal sólo gastó el 29% de los tres mil 700 millones de pesos autorizados para publicidad en medios, lo que implica hasta agosto un subejercicio del 71% del gasto programado.
Enseguida veremos cómo se han administrado esos recursos, según la partida 3700, aunque desde ahora con estos datos puede decirse que, al respecto, el gobierno ha carecido de estrategias de comunicación y que el ejercicio del presupuesto al finalizar 2007 será un enorme dispendio del que saldrán favorecidos sólo algunos medios (y perjudicados muchos más) según la tendencia registrada hasta ahora el dinero deviene en un instrumento político.
Compras de otoño
Las dependencias gubernamentales tendrán que deshacerse de los recursos, literalmente, y gastar dos terceras partes del total en apenas cuatro meses, lo que significa dos mil 659 millones 893 mil 280 pesos. Esto, si es que no se quiere perder el techo presupuestal proyectado por el mismo gobierno y que por ley se vería afectado para el próximo ejercicio fiscal al no comprobarse el gasto total de los recursos aprobados en 2007.
Poco antes del informe presidencial los recursos fluyeron. Sólo en agosto, por ejemplo, Televisa recibió 91 millones 734 mil pesos, es decir, 34 millones 579 mil 810 pesos más de lo que obtuvo TV Azteca en los primeros seis meses. De acuerdo con información de la Secretaría de Gobernación que etcétera solicitó vía ley de transparencia, Televisa captó durante ese mes en TV abierta 89 millones 494 mil pesos, mientras que sus divisiones radiofónicas y editorial obtuvieron un millón 289 mil pesos y 950 mil pesos, respectivamente. Ningún medio ha recibido en un solo mes tanto dinero. (Ver tabla II)
etcétera dio a conocer en su edición de septiembre un corte del gasto publicitario que el gobierno federal destinó a los medios durante el primer semestre de gestión. Con la actualización de los recursos erogados entre julio y agosto, se observa que a pesar de un acelerado incremento de los pagos a varios medios, continúa perfilándose un inminente subejercicio que sólo podría evitarse si el gobierno gastara en cuatro meses el 70% de los tres mil 700 millones de pesos autorizados para distribuirse a lo largo de 12 meses. Ante esta situación la recta final del año acusa improvisación y un incremento arbitrario de pagos, el flujo de los recursos durante el primer semestre implica sólo el 12.7% (equivalente a 470 mdp) de la cantidad total programada para este año. (Ver etcétera, septiembre 2007)
Agosto equivale a cinco meses
Conforme avanza el tiempo, más se gasta: el total de pagos de enero a julio asciende a 210 millones 219 mil pesos. En agosto esa cifra casi se duplica al registrar 407 millones 54 pesos. Es decir; en sólo dos meses se ejercieron 617 millones 274 mil pesos, casi el 17% del presupuesto anual.
No existe justificación técnica o normativa para anunciarse al final del año, solamente una lógica discrecional y burocrática sin estrategia de comunicación o con intenciones políticas que no son claras en el trato con los medios puede explicar este hecho con el que el gobierno se deshace de recursos a última hora y disminuye, retira o incrementa el gasto promedio de inversión en varias publicaciones sin explicación alguna.
Aunque Televisa encabeza la lista de medios que más publicidad gubernamental recibieron en estos últimos dos meses, TV Azteca es la empresa donde la administración actual ha gastado más por dicho concepto, con un monto total superior a los 120 mdp en los ocho primeros meses de 2007. (Ver tabla I)
En la información entregada por el gobierno federal no se explica si Televisa también obtuvo ingresos a través de la agencia Olabuenaga Chemistri, una de las empresas que más recursos ha recibido, con 48 millones 69 mil 610 pesos el primer semestre del año y más de 50 millones entre julio y agosto (ver recuadro).
El análisis de la información reafirma la discrecionalidad en el comportamiento del gasto publicitario, al igual que en las entregas anteriores que etcétera ha realizado, ahora se muestra una importante concentración en pocos medios. En este caso, Azteca, Televisa y Olabuenaga Chemistri acaparan el 28.77% de los recursos que se han gastado en este rubro. Cada una de estas empresas ha captado el 11.09%, 9.04% y 8.64% respectivamente.
En el caso de las radiodifusoras destaca también Televisa, que en un semestre recibió menos de 250 mil pesos en esta materia, mientras que en julio y agosto ha captado poco menos de un millón 300 mil pesos.
Radiorama, cuyo concesionario preside la CIRT, se mantiene como el grupo radial que más recursos ha percibido en el año como nunca en el sexenio anterior con un total de 25 millones 993 mil 180 pesos. El corporativo recibió la mayor parte de ese monto en el primer semestre del año y en los últimos dos meses sólo ha captado dos millones 728 mdp. Radio Fórmula, Grupo Acir y Núcleo Radio Mil continúan en la lista como los consorcios radiofónicos que más dinero han obtenido al respecto.
Reforma vuelve a ganar
En el caso de la prensa se conserva la tendencia de enero a junio: Reforma encabeza la lista de las publicaciones con más publicidad gubernamental. Entre julio y agosto el diario obtuvo cinco millones 640 mil 300 pesos, cantidad que incluye además de inserciones publicitarias el extraño concepto de “Estudios (precampaña y postcampaña)”; como no sabemos a qué se refiere esto, ya solicitamos la información respectiva. Esos poco más de cinco millones sólo están por debajo de lo que percibieron Televisa, Olabuenaga Chemistri y TV Azteca, pero es mucho mayor a su promedio mensual que hasta junio era de un millón y medio por mes. (En contraste, Diario Monitor ha recibido la quinta parte de lo que Reforma.)
Lo mismo sucede con El Universal, que en promedio ganó por mes 907 mil pesos hasta junio, pero sólo en el periodo de julio y agosto recaudó tres millones 486 mil 260 pesos, es decir un millón 743 mil 130 pesos en promedio por mes. De igual forma ocurre con La Jornada, que obtuvo en los mismos dos meses tres millones 179 mil 80 pesos, un promedio mucho mayor a los cinco millones 352 mil 850 pesos que recaudó a lo largo de seis meses.
Proceso, inexplicable…
Otra de las muestras más claras de la arbitrariedad y discrecionalidad en el manejo del presupuesto es el caso de Proceso, que se encuentra entre las publicaciones que menos han obtenido recursos por concepto de publicidad gubernamental. Por ofrecer un dato comparativo, inexplicablemente Proceso tiene casi seis veces menos recursos que la revista Vértigo (propiedad de Televisión Azteca).
La publicación fundada por Julio Scherer en 1976 es el semanario más importante del país. El dramático castigo a sus asignaciones publicitarias no tiene lógica más que la del boicot dado su contenido informativo y editorial, ni siquiera a partir de los criterios técnicos que justifican las pautas sólo a partir del tiraje, pues en el padrón de medios impresos certificados que elabora la propia Segob, el promedio de circulación pagada de Proceso es de 54 mil 444 ejemplares, mientras que el de Vértigo, según el mismo padrón, es de 49 mil ejemplares.
Sucede algo similar en el caso de la revista especializada Zócalo, que registra una circulación pagada de mil 500 ejemplares, mientras que El Huevo acredita apenas 809 ejemplares. Sin embargo, y de forma inconsistente con la propia lógica normativa de la administración federal, el gobierno destinó entre julio y agosto 165 mil 450 pesos para El Huevo y 21 mil 280 pesos a Zócalo.
Medios públicos
Durante los primeros ocho meses de 2007, los medios públicos han obtenido vía publicidad del gobierno federal, por medio de la partida presupuestal ya dicha, nueve millones 798 mil 50 pesos. Esta cantidad evidencia dos cosas: el subejercicio de recursos el gobierno federal en el gasto publicitario y el desprecio hacia estos medios, pues el monto que han recibido equivale a menos del 1% de los recursos erogados en materia. Ni siquiera en sus cuantiosas compras de otoño, el gobierno federal aumentó el porcentaje a los medios públicos.
En los primeros seis meses del año, los medios públicos captaron en conjunto un millón cien mil pesos, mientras que en los últimos dos meses esta cantidad se incrementó a más de ocho millones y medio.
La mayor parte de ese monto fue destinado a Canal Once, que en dos meses percibió cinco millones 175 mil pesos, a diferencia del primer semestre de 2007, cuando recibió cero pesos por publicidad de la administración federal. Es decir, un 52.81% del gasto que se ha realizado en medios públicos por la contratación de anuncios gubernamentales.
Por su parte, Canal 22 incrementó considerablemente los recursos, al pasar de 622 mil pesos a poco menos de tres mdp. Es el mismo caso de Radio Educación, aunque en menor magnitud, que pasó de 79 mil 650 pesos a 337 mil 100. El Imer fue el único que vio reducidos sus recursos, mientras que la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales obtuvo 230 mil pesos. (Ver tabla III).
Y lo que sigue
Cada dos meses estaremos informando al respecto, según los datos oficiales que obtengamos a partir de las peticiones formales respectivas. Creemos que ese material, junto con los demás que hemos publicado desde hace tres años, ayuda para comprender por qué hace falta una ley de comunicación social en el país, y a enriquecer la iniciativa que presentaron los legisladores Carlos Sotelo y Valentina Batres.
¿Y las cuentas de Olabuenaga?
Olabuenaga Chemistri es la agencia publicitaria que más recursos ha recibido del gobierno federal en este año: 98 millones 296 mil pesos en ocho meses. La mayor parte de éstos provino del Consejo de Promoción Turística de México (Promotur) y cabe señalar que los servicios de la agencia son para hacerse cargo de la producción y la contratación de publicidad. De tal forma, no se sabe qué empresas mediáticas han obtenido recursos a través de ese rubro aunque ya hicimos la petición específica a Promotur.
Además, esa agencia, que tiene entre sus clientes principales a Televisa, ganó varias veces las licitaciones a las que convoca Promotur para realizar sus campañas publicitarias en el país. En el periodo de mayo de 2006 a junio de 2007, Olabuenaga ganó los concursos para las campañas institucional y cooperativa a nivel nacional, que representan cada una un gasto mínimo de 43 y 84 mdp, respectivamente, y un máximo de 61.5 y 170 mdp. Es decir, el consejo tenía un presupuesto aprobado de más de 230 millones para la empresa que dirige Ana María Olabuenaga.
El Consejo de Promoción Turística ha sido cuestionado en varias ocasiones porque sus contratos publicitarios, que ascienden a cifras millonarias en la mayor parte de los casos, se concentran con las grandes agencias, como la propia Olabuenaga, McCann Erikson y Young