De acuerdo con un reporte publicado en el diario The Washington Post, Google encontró evidencias de que agentes rusos compraron anuncios en sus plataformas para tratar de influir en la opinión pública estadounidense durante la elección presidencial de noviembre de 2016.
El rotativo cita fuentes cercanas a la investigaciones, que revelan que la empresa tecnológica detectó que desde distintas cuentas en Rusia, se adquirieron anuncios publicitarios en YouTube, Gmail y sus servicios publicitarios en Google Search y DoubleClick, por un monto aproximado de 100 mil dólares.
Los consultados mencionan que en algunas de las piezas publicitarias se promovía no solamente a Donald Trump, sino también al precandidato demócrata Bernie Sanders y la candidata del Partido Verde, Jill Stein.
Según lo publicado por el periódico estadounidense, estos anuncios tienen un origen distinto a las cuentas, presuntamente vinculadas al Kremlin que gestionaron publicidad en Facebook, lo que indica que existieron “esfuerzos de amplio espectro” desde Rusia para efectuar una campaña de desinformación sobre diversos temas abordados durante la contienda electoral.
Pese a que Google, el mayor administrador de publicidad en internet, desestimó en un principio la posibilidad de una injerencia rusa en sus plataformas, finalmente decidió ordenar una investigación, aunque ésta no ha tenido la misma resonancia que las que llevan a cabo Facebook y Twitter sobre el mismo tema, concluye The Washington Post.
(Con información de Reuters)
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