El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva fue puesto en libertad después de responder las preguntas en relación con su presunta participación en la red de corrupción en el caso Petrobras.
Lula da Silva fue detenido la mañana de este viernes en su casa de São Bernardo como parte de la operación policiaca nombrada “Aletheia”, la cual contó con la participación de 200 policías y 30 auditores de Hacienda.
A través de un comunicado el Instituto Lula negó su conocimiento y participación en la red de corrupción estatal, ahí, el exmandatario aseguró que “jamás participó, directa o indirectamente, de cualquier ilegalidad, ya sea en el caso que afecta a la petrolera o en cualquier otro, antes, durante y después de su gobierno”.
Los comentarios son la respuesta a un artículo publicado en revista Istoé, donde la supuesta declaración del exlíder del gobierno en el Senado, Delcidio Amaral, señala que la presidenta Dilma Rousseff conoce la trama corrupta y la ocultó de la justicia.
Cabe señalar que después de que se informó sobre la detención de Lula, Rousseff convocó a una reunión urgente con sus ministros del área política para analizar la situación del expresidente.
De acuerdo con la agencia de noticias EFE, la junta contó con la participación del ministro de presidencia, Jaques Wagner; de la Secretaría, Ricardo Berzoini; Información, Edinho Silva; y de Justicia, Wellington Lima; así como el abogado general de la Unión, José Eduardo Cardozo.
(Con información de El Mundo)
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