El presidente de Venezuela Nicolás Maduro anunció este viernes la extensión de las medidas de la emergencia económica por 60 días más, lo que lo faculta para suspender el orden constitucional y tener el control del funcionamiento de la economía.
La medida de Estado de Excepción se tomó por primera vez hace 120 días, en un polémico movimiento que la oposición calificó de anticonstitucional.
El mandatario justificó la extensión, en cadena nacional en el Palacio de Miraflores, debido a la situación económica y de seguridad que vive el país, que según él son “causadas por fuerzas extranjeras” que pretenden derrocarlo.
“He decidido aprobar un nuevo decreto de Estado de Excepción y emergencia económica que me dé el poder suficiente para derrocar el golpe de Estado, la guerra económica, para estabilizar socialmente nuestro país y para enfrentar todas las amenazas internacionales y nacionales que hay contra nuestra patria en este momento”, aseguró Maduro, según el reporte de El País.
La Constitución establece que el estado de emergencia da facultades extraordinarias al presidente para limitar el uso de servicios o el consumo de artículos de primera necesidad. Sin embargo, no se tienen detalles si este nuevo Estado de Excepción implicará la restricción de otras garantías constitucionales como el derecho al libre tránsito, las inspecciones domiciliarias sin orden judicial, la prohibición de reuniones públicas o la suspensión del porte de armas.
La oposición, representada por la alianza de los partidos políticos en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), convocó para este sábado a protestas en las calles para presionar al Consejo Nacional Supremo Electoral (CNE) a que agilice los trámites para una pronta salida del gobierno de Maduro mediante la convocatoria de un referéndum revocatorio.
Respecto a la suspensión de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, el mandatario venezolano reiteró esta semana que “las mismas fuerzas que dieron un golpe de Estado en Brasil” buscan derrocarlo a él, de acuerdo a la información de BBC.
Este año la crisis económica se agravó en el país, alargando las colas para comprar productos, disparando la inflación (180.9% en 2015) y exacerbando la recesión. A esto se sumó la formalización del racionamiento eléctrico y agua en todo el país, problemática que ha profundizado el descontento social en general.
iesz
