Nicole Kidman ha sido una de las protagonistas de la 69ª gala de los Emmy al hacerse con el premio a la mejor actriz principal de miniserie por su papel en Big Little Lies y por haber pronunciado uno de los discursos más inspiradores de la noche. La intérprete recogió el galardón emocionada y agradeció a su familia el apoyo que ha recibido en su carrera. Además, la australiana denunció la lacra que siguen sufriendo las mujeres víctimas de violencia de género, temática de la que trata la serie de HBO, que consiguió otros cuatro premios. “Quiero que [mis hijas] sepan que a veces cuando actúas tienes la oportunidad de dar un mensaje importante (…) Hemos puesto el foco sobre la violencia de género”, manifestó Kidman, quien además aprovechó la ocasión para pedir más y mejores papeles para las mujeres.
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