“Para México el derecho de asilo es sagrado”, afirmó hoy por la mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador al referirse a los nueve exfuncionarios del gobierno de Evo Morales que se mantienen en la Embajada de México en Bolivia. Apenas ayer la canciller boliviana, Karen Longaric, comentó que cuando menos cinco de ellos son acusados de terrorismo.
El mandatario, al aclarar que “no vamos a caer en ninguna provocación”, hizo una encendida defensa de la postura mexicana: “Que se haga valer el derecho de asilo. No podemos nosotros flaquear en este asunto de darle protección a perseguidos políticos que recibieron en nuestra embajada un asilo, y luego se produjeron órdenes de aprehensión.
“Si nosotros entregamos a estas personas, estaríamos acabando con el derecho de asilo, que para México es sagrado”.
Añadió que “es parte del derecho internacional, pero en el caso de nuestro país, siempre hasta en las circunstancias más difíciles se ha hecho valer”.
Asimismo, López Obrador destacó el papel que ha desempeñado la embajadora María Teresa Mercado, quien fue declarada non grata por el gobierno boliviano y tuvo que regresar a México. De ella dijo que “fue una diplomática de primer orden que actuó con inteligencia y firmeza. Seguramente la Secretaría de Relaciones Exteriores sabrá reconocer su trabajo. Yo, como presidente, estoy muy orgullosos del desempeño que tuvo la embajadora”.
Por su parte, la embajadora Mercado agradeció las palabras del presidente en su cuenta de Twitter: “Mi agradecimiento profundo por sus palabras señor Presidente López Obrador!!!! Honrada de servir a mi país y de su tradición de asilo!!!”.
Apenas ayer, en entrevista con El Financiero Bloomberg, la ministra de Relaciones Exteriores de Bolivia, Karen Longaric, explicó que cuando menos cinco de los exfuncionarios de la administración de Evo Morales que se encuentran en la Embajada de México en La Paz son acusados por delitos como instigación a delinquir, terrorismo y sedición. Al no entregarlos a las autoridades bolivianas se están violando varios tratados internacionales.
Según Longaric, desde el 26 de diciembre se le habían entregado los mandamientos de apremio al menos contra tres exfuncionarios: Juan Ramón Quintana y Wilma Alanoca, exministros de la Presidencia y de Culturas, respectivamente, y de Nicolásslavoconducto Laguna, director de la Agencia de Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación.
Pese a que se ha solicitado al gobierno boliviano el salvoconducto para la salida de ese país de los asilados, Longaric comentó que al tratarse de “un delito de alcance internacional, no son personas que deban beneficiarse con el estatus de asilado. No lo dice Bolivia, lo dicen los tratados internacionales”.
Acerca de la vigilancia sobre la Embajada mexicana, Longaric afirmò que la embajadora Mercado solicitó en cuatro ocasiones reforzar las medidas de seguridad de la sede mexicana, además de que fueron reforzadas por “el peligro que podría existir y ante el riesgo de fuga de los asilados que tenían mandamiento de apremio”.