El nuevo encuestador del diario Reforma, Rodrigo León, admitió que los resultados de las encuestas que ha presentado en el diario y que, invariablemente, le han dado el triunfo a Claudia Sheinbaum y por una amplia ventaja, no son confiables, pues ahora hay “retos y dificultades que antes no existían”.
El mismo día en que se publica una encuesta que le otorga a Claudia el 55% de intención de voto, tan sólo 35% a Xóchitl Gálvez y 10% a Jorge Álvarez Máynez, Rodrigo León publicó un artículo en la sección de opinión titulado “Difícil, Sr. Encuestador”, donde, dicho en breves palabras, advierte que sus encuestas no son confiables, aunque intenta extender ese criterio a todas las encuestas por igual.
“Para brindar algo de entendimiento en medio de las dudas y suspicacias que han despertado las encuestas publicadas en este proceso, conviene hacer un poco de memoria, guardando las debidas particularidades que cada elección tuvo en su momento”, señala, tras mencionar que hay muchas dudas respecto al margen de distancia que diversas encuestas dan a las candidatas.
“Ls condiciones para levantar encuestas hoy en día también son muy diferentes a lo que eran hace 6, 12 o 18 años. El país, el electorado y el contexto en el que hoy los encuestadores salen a las calles y a las comunidades rurales para levantar las entrevistas presentan retos y dificultades que antes no existían”, argumenta.
Afirma que debido a la inseguridad, existen muchos obstáculos para que las empresas encuestadoras realicen entrevistas cara a cara en vivienda. Así, las encuestadoras se ven obligadas a elegir otras zonas más seguras, lo que sesga los resultados.
Las encuestas de @MassiveCaller y @MxElige no son domiciliarias. Por eso la gente es más libre de responder.
— UnTalHassan (@HassanHdezH1) May 29, 2024
“Zonas controladas por el crimen organizado o de alta incidencia delictiva obligan con frecuencia a sustituir las secciones electorales muestreadas originalmente, o bien a desplazar a los encuestadores a lugares más seguros”, afirma, en lo es una admisión de distorsión de la metodología.
León sustituyó a Lorena Becerra como encargado de encuestas en Reforma a partir de noviembre de 2023. Desde este cambio, el diario ha sido muy criticado por los resultados de sus ejercicios demoscópicos y ha sido acusado de favorecer a la candidata oficialista. Estos ataques se han registrado en redes sociales y por parte de algunos analistas políticos.
Según el nuevo encargado del área, la inseguridad pública determina los resultados de las encuestas, pues la gente ya no acepta participar en las mismas como antes.
“En las encuestas nacionales levantadas por este diario a lo largo del 2023, la tasa de rechazo promedió 57 por ciento; en el 2006 estas tasas rondaban el 29 por ciento, en el 2012 el 19 por ciento y en el 2018 el 29 por ciento”.
Aun cuando en este 2024 Reforma ha publicado frecuentes encuestas, León no habla de la tasa de rechazo que corresponde a su gestión, sino que menciona las que corresponden a la etapa de Lorena Becerra.
León dice que ahora es más caro levantar encuestas, puesto que hay que pensar en repetidas visitas para obtener respuestas y que los programas oficiales son un factor a considerar, aunque afirma que “no está del todo claro” qué tanto influyen los programas en las preferencias electorales o en las respuestas de los encuestados.
“Otro componente que en las elecciones pasadas no existía de manera tan marcada era el de los programas sociales del gobierno. Cifras oficiales indican que hoy 30 millones de familias son beneficiarias de algún programa. En la última encuesta nacional de este diario, el 47 por ciento de los respondientes señaló recibir algún apoyo del gobierno directamente o tener un familiar que lo recibía. En la encuesta de la Ciudad de México publicada recientemente, ese porcentaje alcanzó el 50 por ciento”.
El encargado de encuestas también menciona las duras críticas que sus ejercicios han recibido y los atribuye al clima de polarización que vive el país que lleva a que se descalifique “todo aquello o a todo aquel que no coincide con nuestra percepción de la realidad”.
“El clima de polarización política también es un ingrediente nuevo a diferencia del 2018 y 2012, aunque quizá podría llegar a compararse en cierta medida con el del 2006. Sin embargo, en aquel entonces el que una encuesta previera un posible triunfo de Calderón o de López Obrador no concitaba las reacciones que hoy en día despiertan los estudios dependiendo de qué tan estrecha u holgada es la distancia que proyectan entre ambas candidatas”.
Cierra diciendo que en la actualidad, los retos de las encuestas cara a cara es medir los extremos de la sociedad de la manera “más neutral, profesional e independiente”.
ofv