Usuarios de redes sociales exhibieron las contradicciones de la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra, respecto a su postura sobre al Comité contra las Desapariciones Forzadas de la ONU, instancia a la que atacó el pasado de fin de semana, acusándola de injerencista y de actuar con fines desestabilizadores.
Los cibernautas recuperaron el fragmento de una entrevista que Piedra Ibarra concedió a TV UNAM en septiembre de 2020, en la cual elogia el trabajo de dicho comité de la ONU en las investigaciones del caso de Ayotzinapa, a pesar de los obstáculos que le puso el gobierno de Enrique Peña Nieto. Asimismo enfatizó que su intervención era importante para aclarar las irregularidades en los expedientes sobre casos de violencia en el país.
“Yo creo que sería muy importante que este Comité volviera a venir, porque ya estuvo cuando estaba en pleno auge la investigación de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y ellos llevaron una investigación profunda, pero que en aquel entonces el gobierno de Peña Nieto no les permitió avanzar ante ciertas líneas de investigación”, dijo en aquella ocasión.
Su postura en aquella conversación, se contrapone a la que actualmente la ombudsperson asumió en torno al posicionamiento del Comité para las Desapariciones Forzadas de la ONU, donde señala que en México hay una problemática de desapariciones sistemáticas que podría ameritar la apertura de un proceso en dicho órgano para abordar el tema y requerir información al gobierno mexicano.
A diferencia de hace casi cinco años, esta vez Rosario Piedra desacreditó al Comité, al acusarlo de emitir pronunciamientos descontextualizados con afanes injerencistas y de desestabilización para imponer “agendas preestablecidas”, no solo en México sino en toda Latinoamericana.
“Reprobamos a quienes emplean el pretexto de la “cooperación para el Desarrollo” o “para impulsar la democracia y los derechos humanos” como mera imagen pública para realizar sus planes y estrategias político-económicas, en pos de beneficiar el injerencismo norteamericano”, manifestó
En un comunicado de casi 20 páginas, continuamente apela a la soberanía del pueblo y reitera una y otra vez que durante los gobiernos “neoliberales” que había en México la ONU guardó silencio sobre las desapariciones que se cometían desde el gobierno, que también ejercía actos de tortura y represión. En cambio cuando “eso ya no sucede”, ahora sí se pronuncian.
Tras señalar que no se niega la existencia de desapariciones en México, la responsable de la CNDH, alega que éstas ya no se cometen desde el gobierno, sino por grupos delincuenciales cuya actividad se desató desde la “guerra contra el narco” de Felipe Calderón, sexenio a partir del cual cambió el esquema de las desapariciones y la violencia en el país.
Tras enumerar las acciones que, según la CNDH, se han puesto en marcha desde el sexenio pasado para atender la problemática de las desapariciones, como son la creación de fiscalías especializadas, del Comité Nacional de Búsqueda y la atención inmediata de las denuncias presentadas a partir de 2019, entre otras, también recalcó que desde la administración anterior, no se ha probado la participación de autoridades de alto nivel en las desapariciones.
La CNDH no perdió ocasión para insertar la narrativa sobre la corrupción del Poder Judicial que pone en libertad a los perpetradores de violencia, desaparición y otros delitos. También aprovechó el momento para ensalzarse a sí misma al afirmar que la gestión encabezada por Piedra Ibarra, dejó atrás “el deshonroso papel” de sus antecesores, que simulaban y encubrían a las autoridades. En cambio, en su afán de reivindicar “el derecho a la verdad”, quienes hoy están al frente de este organismo, tenían que pronunciarse ante lo que consideran valoraciones equivocadas de los organismos internacionales, sin tomar en cuenta a las víctimas.
“Sería una afrenta al pueblo mexicano que esta Comisión no se pronunciara, desde su rol de defensora de los derechos humanos del pueblo mexicano, en contra de toda intención de usar a las víctimas y su dolor”, anotó.
Pese a esta retórica, Rosario Piedra incurrió en otra contradicción al no presentarse a ninguna de las reuniones celebradas hasta el momento en la Secretaría de Gobernación con los colectivos de búsqueda de desaparecidos, quienes han cuestionado la ausencia de la CNDH en estas mesas e incluso han señalado la pertinencia que la ombudsperson renuncie.
arg

