La Oficina en México del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó la desaparición de tres periodistas y dos familiares de uno de ellos, actos perpetrados el 19 y el 22 de noviembre y exigió a las autoridades hallarlos con vida y castigo a los responsables.
Este jueves se dio a conocer ampliamente que en la madrugada del domingo 19 de noviembre el periodista Marco Antonio Toledo Jaimes, director de El Espectador de Taxco, fue sacado con violencia de su domicilio, con su esposa y su hijo, por personas armadas. Desde entonces no se han tenido noticias de su paradero.
Tres días después, el miércoles 22, fueron privados de su libertad Silvia Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez, del medio local RedSiete. Los dos plagios fueron cometidos en el municipio de Taxco, Guerrero.
La Fiscalía General del Estado de Guerrero anunció que había emitido las fichas de búsqueda correspondientes, que se realizaban los primeros actos de investigación de la desaparición de las cinco personas a través de las fiscalías dedicadas a delitos en agravio contra periodistas y en materia de desaparición forzada.
Por la noche la ONU-DH manifestó su condena a la desaparición de los tres periodistas y convocó a las autoridades del estado y de la Federación para que se coordinen para la búsqueda de las cinco víctimas, además de realizar una investigación para esclarecer lo sucedido y castigar a los responsables.
