México no ha actuado con firmeza para combatir las desapariciones, y aún sus autoridades deben aplicar todas las medidas que permite la ley respectiva para devolver a las personas desaparecidas a sus familias y para erradicar la impunidad casi absoluta existente en ese delito, expresó Volker Türk, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Con un mensaje en video, el funcionario del organismo internacional participó en el acto por el quinto aniversario de la entrada en vigor de la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, realizado en el Museo Memoria y Tolerancia, en el que hizo una descripción crítica de la situación del país en el tema.
Türk dijo que hace cinco años oficialmente se registraron 47 mil casos de desapariciones, y desde entonces ha habido al menos otras 45 mil, además de que en los casos de otras 17 mil personas las autoridades no han establecido cuándo de produjo la desaparición.
Agregó que en México apenas son procesados entre el 2 y el 6 por ciento de los casos de desaparición, además de que se han obtenido menos de 40 condenas.
También señaló que entre los funcionarios mexicanos aún son generalizadas “la desinformación y la insensibilidad” antes esos delitos, además de que no son aplicados adecuadamente los criterios para determinar su responsabilidad y que “la militarización de las funciones de seguridad y policiales sigue profundizándose”.
Otro déficit importante señalado por Türk es la insuficiencia en la implementación de las herramientas consideradas en la ley. Al respecto ejemplificó que no han sido creados el Banco Nacional de Datos Forenses; los registros nacionales de Personas Fallecidas No Identificadas y No Reclamadas, y el de Fosas, así como los programas nacionales Exhumaciones y de Búsqueda, así como el Reglamento de la ley.
“Las autoridades aún tienen que aplicar todo lo que ofrece la ley sobre desapariciones para devolver a las personas desaparecidas a sus familias, erradicar la impunidad casi absoluta en torno a estos delitos y evitar que otras personas corran la misma suerte”, manifestó el funcionario de las Naciones Unidas.
Así, Türk expresó que, a cinco años de la entrada en vigor de la ley respectiva, “el país aún no ha actuado con firmeza para combatir este crimen atroz, que afecta a cientos de miles de personas”.
“Estas son graves afrentas a los derechos humanos. Los hombres, las mujeres, los niños y las niñas en este país no son mercancías desechables que puedan desaparecer o sufrir daños sin que se respeten sus derechos”, resaltó Türk.
El Alto Comisionado también reconoció que ha habido avances en la implementación de las recomendaciones de 2022 del Comité de las Naciones Unidas contra las Desapariciones Forzadas, y animó a las autoridades a sumarse a ese esfuerzo, para lo cual contarán con el apoyo de su Oficina y de los mecanismos internacionales especializados.