Recomendamos: Los “ya no hay” del Presidente, por Vianey Esquinca

Compartir

Del creador de la rifa del avión presidencial sin avión y la consulta contra los expresidentes sin denuncias, llega al escenario nacional “¿quién es quién en las mentiras de la semana?”. Este nuevo espectáculo encabezado por el mandatario Andrés Manuel López Obrador promete horas y horas de distracción, polarización y linchamiento, para diversión y entretenimiento de sus acérrimos seguidores.

Aunque no se han dado detalles de este nuevo ranking, los espectadores, siempre dispuestos a escuchar las ocurrencias presidenciales, están preparando ya su artillería de críticas y vituperios; ya están preparados para cuando les saquen los letreritos de “abuchear”, “aplaudir” o “atacar”.

A fin de ir estableciendo parámetros sobre lo que puede entrar en esta lista y obtener la medalla de oro a la falsedad de la semana, se podría poner como ejemplo de lo que es una mentira, las declaraciones que el propio mandatario ha realizado y que a todas luces han resultado ser embustes.

Por ejemplo, todos los “no hay” que ha dicho en sus mañaneras. “Arriba no hay corrupción, aunque les dé coraje a los conservadores, ya se acabó” (11 de marzo de 2021). La corrupción sigue vivita y coleando como lo ha evidenciado la Auditoría Superior de la Federación. Lo único que pasa es que, cualquier escándalo que se destapa, inmediatamente es minimizado o negociado desde Palacio Nacional.

“Ya no hay impunidad y mucho menos protección a presuntos delincuentes” (4 de agosto de 2020). De acuerdo con Impunidad Cero, la probabilidad de que un delito cometido sea resuelto en nuestro país es tan sólo de 0.9 por ciento. “Ya no hay torturas, desapariciones ni masacres; se respetan los derechos humanos y se castiga al culpable, sea quien sea” (1º de septiembre de 2020), ésta es quizá una de las falacias más grandes y dolorosas que ha dicho el Presidente. La organización Causa en Común ha cuantificado 8,092 eventos de violencia extrema a lo largo de todo el país en lo que va de este sexenio.

“Ya no hay lujos en el gobierno” (22 de junio de 2021), vivir en Palacio Nacional no es exactamente un ejemplo de austeridad. “La Fiscalía (General de la República) es un órgano autónomo, independiente. Y no se puede tampoco acusar a nadie ni condenar a nadie sin las pruebas, sin que un juez declare culpable a un supuesto delincuente” (18 de agosto de 2020). El primer morenista del país tiene muy buen sentido del humor, pues no sólo el fiscal Alejandro Gertz Manero ha convertido a la FGR en una dependencia de Presidencia, sino que el propio mandatario se la ha pasado acusando, sin pruebas, a sus enemigos en sus mañaneras.

“Ya no es como antes que se usaba al CISEN o aparatos del Estado para perseguir y espiar a opositores” (2 de junio de 2021), basta escuchar las últimas acusaciones contra el gobierno, para darse cuenta que la administración de López Obrador sigue espiando a periodistas y opositores políticos.

Para ser justos, también ha habido otros “no hay” que sí son verdaderos. Por ejemplo, cuando dijo: “No hay guerra (contra el narco)” tuvo y tiene razón. El gobierno mexicano no se ha confrontado con el crimen organizado, al contrario, por sus actos parecería que está muy dispuesto a seguirle dando muchos abrazos.

“Ya no hay quien se deje acarrear, son pocos los que todavía son susceptibles de manipulación”, aunque eso lo dijo el 31 de mayo de 2021 y después cambió de opinión diciendo que la clase media sí era muy manipulable, el mandatario no se equivocó. Los mayores enemigos de la mentira son el tiempo y la realidad, y cada vez hay más gente despertando.

Así pues, habrá que ver si el Presidente no se muerde la lengua con su “¿quién es quién en las mentiras?

Ver más en Excélsior

Autor