La Fiscalía General de la República (FGR) pidió una pena de hasta 39 años de prisión para el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, por diversos ilícitos relacionados con la investigación del caso Odebrecht.
Fuentes de la dependencia, que pidieron el anonimato al no estar autorizadas a revelar detalles de la indagatoria, confirmaron a la agencia Reuters que los cargos contra el exfuncionario son por lavado de dinero, asociación delictuosa y cohecho, que en su conjunto suman la mencionada sanción carcelaria.
Explicaron que esta condena está exclusivamente relacionada con las investigaciones por corrupción en contra de la constructora brasileña Odebrecht, es decir, en esta acusación de la FGR no se incluye el caso de la compra a sobreprecio de la planta Agronitrogenados, por el que Lozoya tiene abierta otra carpeta de investigación.
En su argumentación sobre el caso Odebrecht, la Fiscalía acusa al exdirector de Pemex, de recibir más de 9 millones de dólares en sobornos por parte de esta firma, dinero que escondió en empresas fantasma y algunas propiedades, en complicidad con su madre y otros familiares. Asegura que cambio de dichos sobornos, la empresa fue favorecida diversos contratos durante el sexenio de Peña Nieto.
Recientemente, se agregó una línea de investigación adicional luego de que Lozoya revelara que parta de los recursos recibidos por parte de Odebrecht, se emplearon en la campaña que llevó a la presidencia a Enrique Peña Nieto en 2012.
Desde que fue extraditado desde España a mediados de 2020, Lozoya había enfrentado su proceso en libertad, sin embargo, se le encarceló luego de que fueran divulgadas unas fotografías en donde se le observa cenando en un restaurante de lujo en las Lomas de Chapultepec.
Lozoya Austin, quien se declaró inocente ante el juez que lleva el caso, ha involucrado en sus testimonios a diversos personajes políticos como el excandidato presidencial Ricardo Anaya y el exsenador del PAN, Jorge Luis Lavalle, entre otros, de recibir sobornos a cambio de aprobar la reforma energética. También implicó al exsecretario de Hacienda Luis Videgary y al propio Peña Nieto de ser beneficiarios directos del entramado de corrupción con la constructora Odebrecht.
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