Edecanes que trabajan para el Senado de la República denunciaron este domingo que son víctimas de acoso laboral y sexual, además de que les han pedido su renuncia tras haber denunciado su situación.
Los acosos ya habían sido denunciados por la diputada de la Asamblea Constituyente de la CDMX, Gabriela Rodríguez, hace unos meses, cuando pidió que no se obligara a las edecanes a vestir con escotes o minifaldas.
En su momento, el presidente de la Mesa Directiva de la Asamblea Constituyente, Alejandro Encinas, dijo que era el Senado quien se encargaba de contratar a la empresa para la cual trabajan las ayudantes.
Sin embargo, este jueves, Rodríguez volvió a denunciar esta situación pero ahora incluso habló de que varias de las trabajadoras ya les pidieron su renuncia como una especie de represalia por hablar del acoso.
“Sigo muy preocupada, cada vez más, por nuestras compañeras ayudantes a quienes les han pedido en esta ocasión que entreguen su empleo el día 31 de diciembre. Considero por las condiciones en que se está dando esto, que se trata de una represalia por la denuncia que hicieron de hostigamiento laboral y sexual”, sostuvo la legisladora de Morena de acuerdo con el reporte de Reforma.
“Me parece gravísimo que vayan a dejar a nuestras compañeras sin empleo, ellas quieren conservar su empleo, no es posible que queden fuera por haber denunciado.
Ese mismo día, Encinas insistió en que el problema debe ser resuelto por el Senado por lo que dijo que interpondrán “buenos oficios para atender esta situación”.
mahy
