El virus del Zika, que en entre 2015 y 2016 afectó a más de 70 países ya no es considerada una emergencia sanitaria de carácter global. Así lo anunció este viernes el presidente del Comité de Emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), David Heymann.
No obstante, la epidemia aún es “una prioridad” y un gran problema sanitario a largo plazo pero no tan urgente como hace meses.
El virus "no va a desaparecer", advirtió Heymann en una conferencia de prensa virtual.
Asimismo, la organización informó que creará un grupo de expertos para vigilar y analizar la epidemia y sus efectos de manera constante, además, mantiene parte de sus recomendaciones a los países más afectados, como Brasil y algunos de Centroamérica.
La emergencia fue declarada el pasado 1 de febrero tras comprobarse un extraordinario aumento de los casos de microcefalia en bebés relacionados con el Zika.
Y es que de acuerdo con el director del programa de emergencias de la OMS, Peter Salama, hasta el momento, hay más dos mil 300 casos confirmados de bebés nacidos bajo estas circunstancias (La mayoría en Brasil).
Sin embargo, un dato alentador es que, según la organización, en las últimas semanas no se ha declarado ningún nuevo caso de infección por dicho mosquito, situación que derivó la decisión.
(Con información de El País)
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