De acuerdo con la declaración de un testigo protegido por el gobierno de Estados Unidos, el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, recibió financiamiento del Cártel del Golfo para su campaña política en 2004, cuando contendió por la presidencia municipal de Reynosa, cargo que a la postre obtuvo.
El testigo Antonio Peña Argüelles, identificado como “Ángeles”, quien fue clave en las investigaciones para la detención y posterior consignación del exgobernador tamaulipeco, Tomás Yarrington, afirmó que una vez que García Cabeza de Vaca llegó a la alcaldía de Reynosa, cumplió las condiciones que le impuso el grupo delincuencial a cambio de su apoyo económico.
El documento, mostrado por Aristegui Noticias, forma parte las pruebas que reunió el morenista Alejandro Rojas Díaz Durán en contra del mandatario estatal y actualmente está en poder de la Fiscalía General de la República (FGR), que ha iniciado una investigación en contra del funcionario.
El testimonio, fechado el 23 de enero de 2012, fue recabado por agentes de la entonces PGR en la Corte Federal del Distrito Oeste de Texas, donde se celebraba el juicio en contra de Peña Argüelles, acusado por lavado de dinero y vínculos con el narcotráfico, delitos por los que había sido sentenciado a 20 años de prisión.
En su declaración, el indiciado confesó ser el enlace entre el Cártel del Golfo y Tomás Yarrington, quien en 2004 le solicitó recabar dinero del grupo criminal para apoyar al entonces candidato opositor a la alcaldía de Francisco García Cabeza de Vaca. Agregó que para cumplir con el encargo, contactó a Héctor Sauceda, alias “El Caris”, integrante del citado cártel. A él le aseguró que de resultar ganador, García Cabeza de Vaca se pondría a sus órdenes “para lo que se les ofreciera”.
Peña Argüelles detalló que una vez que se le hizo entrega de medio millón de dólares, se entrevistó con García Cabeza de Vaca en el restaurante del Hotel Holiday Inn de Reynosa para darle el dinero. Se presentó a la reunión acompañado de su hermano José Manuel y le respondió que estaría a disposición del Cártel del Golfo.
Según la declaración, una vez que Francisco García Cabeza de Vaca obtuvo el triunfo en la presidencia municipal de Reynosa, se reunía frecuentemente con Peña Argüelles en un rancho de su propiedad y también compartían su afición por la cacería.
En el testimonio se indica que ya como alcalde, García Cabeza de Vaca cumplió con las condiciones que le impuso el grupo delictivo, entre otros, colocar a gente de su confianza en puestos clave de la policía municipal. También les permitía a los integrantes del Cártel llevar a cabo diversos festejos.
Una vez que se hizo público esta declaración, el exsenador panista Roberto Gil Zuarth, quien fungía como abogado de García Cabeza de Vaca, aseguró que los documentos presentados por Alejandro Rojas Díaz-Durán son falsificados. Precisó que en su momento, el Senado preguntó a la PGR si este testimonio era real y mediante un oficio, la dependencia afirmó que la información al respecto había sido manipulada.
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