Zacapu, Michoacán
Toponimia
Zacapu es una palabra de origen chichimeca que significa “Lugar pedregoso”.
Historia
La iglesia y el convento se construyeron hacia 1548. La dirección de la primera obra estuvo a cargo de fray Jacobo Daciano. Intervinieron trabajadores de Querécuaro, en la sierra de Cherán. Más tarde una segunda iglesia y convento fue construida por fray Pedro de Pila en los cimientos de la primera. Esta obra fue hecha de mampostería. Es el convento que vio Ponce en 1586. En ese momento el convento estaba terminado, pero la iglesia se hallaba en construcción (G. Kubler). Daciano también intervino en la reconstrucción, por la misma época, del conjunto de Tzintzuntzan.
Las crónicas señalan que en 1548, cuando fray Jacobo caminaba de Cherán a la encomienda de Zacapu, acompañado de una comitiva de indígenas, les anocheció en el bosque muy cerca del lago y ahí acamparon. Al amanecer el fraile llamó a todos y les dijo que era voluntad de Dios que en ese lugar se construyera una iglesia. Los indios desmontaron el sitio, abrieron cimientos y se tiró el cordel para iniciar la construcción. Después trazaron calles ubicando la plaza, el tianguis y la casa real. De esa acción el 29 de junio de 1548 se funda Zacapu.
Descripción
Atrio
Hay un atrio bardeado que fue parte del original. Del nivel de la calle, para ingresar al conjunto conventual hay que subir siete escalones. Al cruzar la calle hay una plaza que debió ser parte del primer atrio.
Cruz atrial
Es del siglo XVII. Está labrada en piedra y todavía se pueden ver algunos de los elementos originales. Es muy bella. Está en el atrio hacia la izquierda de la iglesia.
Portal de peregrinos/Portería
Tiene tres arcos de medio punto que se sostienen en pilastras. En la parte superior un corredor, una loggia, con pilares de madera que sostienen un techo de vigas con teja. Al frente la escultura de fray Jacobo Daciano. Aquí mismo un reloj de sol de 1858.
Iglesia
Exterior
La fachada enmarca la portada y se añade el remate mixtilíneo donde se encuentra un reloj. A la izquierda la torre.
La portada tiene dos cuerpos. El estilo es plateresco renacentista. El primero es un arco de medio punto enmarcado en dos columnas de capiteles corintios. Después hay otros capiteles que se integran a una cornisa donde hay dos pequeñas columnas que rematan en unas conchas. A los lados del arco hay también dos conchas. Elemento común en las portadas de las iglesias michoacanas del siglo XVI.
El segundo cuerpo es la ventana del coro es estilo ajimez, (ventana con dos aberturas que está dividida verticalmente en dos partes iguales mediante una pequeña columna o pilastrilla llamada mainel o parteluz, sobre la que se apoyan dos arcos, generalmente de medio punto). Este tipo de ventana también se conoce como geminada (objeto formado por dos elementos iguales o bien distintos colocados en parejas). En catalán se utiliza el concepto de ventana biforada. Este tipo de ventana se utilizó mucho por la arquitectura románica y gótica.
Aquí la columna que divide la ventana tiene un capitel corintio. Como en el caso del arco del primer cuerpo se enmarca en dos columnas de capiteles corintios. Después hay otros capiteles que se integran a una cornisa donde hay dos pequeñas columnas que rematan en unas conchas. A los lados, sobre la pared, hay dos conchas. La portada es una obra de arte. Es muy bella.
Al lado izquierdo está la torre que tiene tres cuerpos, una cúpula y una linternilla. Es una obra del siglo XVIII. El primer cuerpo es rectangular y es la base. El segundo tiene ventanas ajimes. El tercero de forma octagonal con arcos de medio punto alargados.
Interior
En su interior la iglesia es de una nave techada con un plafón y viguería de madera. Los altares son neoclásicos. No queda nada del siglo XVI.
El altar mayor tiene un cuerpo, tres calles y un remate. En la del centro un ciprés con cuatro columnas con capiteles corintios. En el interior un Cristo de la época colonial. En las calles laterales dos columnas con capiteles corintios.
Convento
La forma es cuadrada. Tiene claustro bajo y alto. Los dos con cuatro arcos de medio punto sostenidos en columnas. Las de la parte superior son más delgadas. Los techos son de viga y teja.
En el Arte Virreinal en Michoacán se dice que el claustro tiene más las características y el estilo de una obra civil que una de carácter religiosa. Plantea que el estilo es “toscano” de “aplomo renacentista”. En 1586 fray Pedro de Pila reconstruye este claustro.
En el claustro bajo hay cuatro puertas como la primera foto. La de abajo es la entrada desde la portería. A la izquierda el vestigio de un fresco muy dañado.
Comentarios
Es una fundación de fray Jacobo Daciano. Impresiona el trabajo de la portada y también la elegancia y belleza del claustro. Las dos obras son producto de una arquitectura de gran calidad. En las notas de la visita de 1983 escribí: “El claustro es realmente diferente al de los otros conventos del siglo XVI. Uno se siente en una construcción civil y no religiosa”.
Al constatar lo que se conserva de la construcción original uno se pregunta ¿cuál sería la riqueza del interior de la iglesia? ¿cómo sería el altar mayor? En las tres visitas que he hecho siempre me sorprende la portada y el claustro. Son grandes obras.
Visitas
1983; 1994; 2021 (julio)
Fuentes consultadas
-Notas de mis visitas.
-Kubler, George, Arquitectura Mexicana del Siglo XVI, FCE. México, 1983.
Twitter: @RubenAguilar