La irrupción de los avances tecnológicos no ha dejado espacio sin cubrir, hoy casi todo puede resolverse desde un dispositivo móvil o fijo y una conexión a la red. Este imperio digital incluye a los organismos que conforman el sector gubernamental, y da lugar al Gobierno Electrónico (Egovernment) o Gobierno Digital.
El Gobierno Electrónico se puede definir como “el uso de las Tecnologías de Información y Comunicación TIC, por parte de las instituciones de gobierno, para mejorar cualitativamente los servicios e información que se ofrecen a los ciudadanos; aumentar la eficiencia y eficacia de la gestión pública e incrementar sustantivamente la transparencia del sector público y la participación ciudadana”. (OEA)
Según este organismo el Gobierno Electrónico implica innovación en las relaciones internas y externas del gobierno con:
1. Otras agencias gubernamentales
2. Sus propios empleados
3. Las empresas y el ciudadano
Tiene implicaciones sobre la organización y función del gobierno en lo que se refiere a los siguientes aspectos:
1. Acceso a la información
2. Prestación de servicios y realización de trámites
3. Participación ciudadana
4. Busca optimizar el uso de los recursos para el logro de los objetivos trazados
5. Su implementación implica el paso por una serie de estados (o fases), no necesariamente consecutivos
6. Es un medio, no un fin en sí mismo De igual manera, establece las “Fases del Gobierno Electrónico”, mismas que no necesariamente tienen un orden consecutivo, las denomina así:
• Presencia. Que refiere en esencia a brindar información a los usuarios. En este caso se insertan las páginas web institucionales, portales de transparencia, sitios con información focalizada de trámites y servicios, entre otros.
• Interacción. En esta etapa se incluye la oferta de servicios, por lo tanto las personas tienen acceso a información crítica, llenar formatos que puede disponer de la red y establecer comunicación mediante correo electrónico.
• Transacción. Esta etapa consiste en que las instituciones públicas ofrecen la realización de servicios a través de Internet, esto es, el auto servicio mediante el cual los ciudadanos pueden realizar trámites completos en línea. Como referencia podemos encontrar las líneas de captura para pago de impuestos en las páginas web, la presentación de la declaración de impuestos, los kioscos o cajeros de servicios electrónicos.
• Transformación. Consiste en la integración total entre instituciones gubernamentales y ciudadanía, ofreciendo servicios cada vez más personalizados. En esta etapa nace la llamada “Ventanilla Única” y “Sistemas de agencias cruzadas con servicios compartidos”.
• Participación democrática. La máxima aspiración consiste en lograr que los avances tecnológicos puedan ser el medio para ejercer derechos ciudadanos, tales como el voto electrónico y el acceso a la información sobre acciones y decisiones de los gobernantes elegidos, e incluso, la contraloría o vigilancia social.
Por su parte, la Secretaría de la Función Pública del Gobierno Federal en México establece que “el concepto de Gobierno Electrónico incluye todas aquellas actividades basadas en las modernas tecnologías informáticas, en particular Internet, que el Estado desarrolla para aumentar la eficiencia de la gestión pública, mejorar los servicios ofrecidos a los ciudadanos y proveer a las acciones de gobierno de un marco mucho más transparente que el actual. Estas actividades cubren aspectos internos de la gestión de los organismos públicos, la difusión masiva de la información sobre los actos del gobierno, así como la prestación de más y mejores servicios a los administrados”. (SFP, 2013)
Una queja recurrente de la sociedad es la tortuosidad que implica un trámite o servicio público, sumándose a ello la posibilidad de la comisión de actos de corrupción en ventanilla e incluso malos tratos de los empleados de gobierno.
La adopción de soluciones basadas en el uso de Internet, plataformas y hoy aplicaciones, rompió un paradigma en la manera en que las instituciones del sector gubernamental ofrecen servicios a la población en el mundo entero, trayendo como principales beneficios mayor transparencia, reducción de tiempos de espera y en muchos casos, trámites que se han simplificado.
Desde luego, estos cambios no se gestaron solamente a partir de los avances tecnológicos sino que forman parte de un proceso de transformación más complejo que vino acompañado del nacimiento de nuevos derechos como el de acceso a la información institucional y el auge de los temas de participación ciudadana en la toma de decisiones en los asuntos públicos.
Esta tendencia internacional se ha traducido en innovaciones que buscan hacer competitivo al gobierno pero ante todo, generar respuesta a las demandas de la sociedad que también se ha transformado en los últimos años, ahora es más exigente y menos tolerante hacia la ineficiencia e ineficacia en los servicios que presta el Estado.
Ello se explica porque las personas tienen acceso a grandes volúmenes de información que anteriormente era de uso exclusivo de las instituciones, lo cual les coloca en una postura –al menos en teoría– de mayor involucramiento en los temas de interés público antes limitados a la burocracia.
Hoy en día, el aparato burocrático de todos los niveles y ámbitos de competencia, está sujeto al escrutinio de los ciudadanos de manera permanente, hecho al que se suma el uso cada vez mayor de las redes sociales, con el propósito de exhibir actos irregulares, malos tratos, actitudes poco éticas, entre otros, por parte de quienes ostentan un encargo público.
La tecnología es un tema transversal, que incide en todas las esferas de la vida y convivencia de las personas, tanto en el plano individual como en la búsqueda del beneficio colectivo, este es el caso del gobierno electrónico, cuyo objetivo no es solamente el brindar un servicio de mayor calidad a la sociedad, sino abonar a la modernización del Estado a partir de la adopción de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) y establecer una mejor relación entre gobierno y sociedad.
Los pioneros y las mejores prácticas en el mundo Dinamarca. Antecedente de acciones de gobierno electrónico: 1972. En 2002 estableció un marco legal que hizo posible la firma electrónica y el acceso a la información pública, entre otros. Los servicios ciudadanos ofrecidos hacen que esté a la cabeza de los rankings sobre implementación de un gobierno electrónico. (IGovernment, 2013)
1996. Gran Bretaña. En 2002 lanza la estrategia nacional para el e-gobierno local, seguida de una serie de iniciativas legales en el marco de una e-cumbre internacional, en la cual se anunció la intención de proporcionar conectividad de banda ancha a organizaciones públicas claves, así como seis mil millones de dólares en inversiones TIC. (IGovernment, 2013)
1999. Suecia: Es el primer país del mundo en introducir en su legislación las temáticas acerca de la libertad de información, rápidamente se une al auge de la aplicación de innovaciones tecnológicas. En 1999, el gobierno presenta el programa “Administración Pública al Servicio de la Democracia”, indicando que todos los servicios a los ciudadanos y negocios se deben proporcionar a través de Internet. De esta forma, en el mismo año, se adopta la estrategia “Sociedad de la información para todos” diseñada para consolidar a Suecia como líder en sociedad de la información y además de potenciar a las TIC para el crecimiento, empleo, desarrollo regional, democracia, tratamiento justo, calidad de vida, igualdad y administración eficiente. (IGovernment, 2013)
Entre otros países europeos, Finlandia (1996), Holanda (1994), Alemania (1996), Austria (1996), Irlanda (1994), Bélgica (1997), Francia (1998) y España (1996), son parte del grupo de líderes y pioneros en el tema del Gobierno Electrónico.
Cuando se habla de acción gubernamental, se parte de la idea de que no existe presupuesto que alcance para dar cobertura a las necesidades crecientes de la población, por lo tanto, en materia tecnológica, no pocas instituciones optan por el uso y promoción de lo que se conoce como software libre que refiere al “software que respeta la libertad de los usuarios y la comunidad. A grandes rasgos, significa que los usuarios tienen la libertad de ejecutar, copiar, distribuir, estudiar, modificar y mejorar el software”. (FSF, 2017)
Este es el caso de Brasil, que ha intentado impulsar a sus empresas nacionales para que diseñen tecnología de uso libre que pueda ser utilizada posteriormente por instancias gubernamentales para construir su plataforma en línea. Esto ha traído como principales beneficios la generación de empleo local, menor dependencia respecto de proveedores extranjeros, así como el fortalecimiento de las compañías para ser competitivas en un mercado globalizado. (SFP, 2013)
Se prevé una segunda fase del programa de gobierno electrónico consistente en captar y traducir en servicios virtuales e información las necesidades de una población digitalmente excluida; de manera que se asegure que los ciudadanos puedan entender fácilmente los vínculos y los textos cuando entren a un sitio gubernamental. Otro aspecto considerado por el gobierno brasileño es la inclusión digital, para que los ciudadanos ejerzan su participación política en la sociedad del conocimiento.
Las iniciativas en este ámbito tienen por objeto garantizar la difusión y el uso de tecnología de la información y la comunicación orientada al desarrollo social, económico, político, cultural, ambiental, centrándose especialmente en las comunidades y los grupos excluidos. (SFP, 2013)
México y el gobierno electrónico
En la última edición del Estudio de las Naciones Unidas sobre el Gobierno Electrónico 2016, México obtuvo el lugar 19 en Servicios en Línea de un total de 193 países, mejorando el resultado por ejemplo de Alemania, Noruega y Dinamarca, situándose a la vez como el mejor de América Latina y el Caribe.
Los esfuerzos que conllevaron este resultado, tienen que ver principalmente en la coordinación institucional, el diseño de su estrategia y la facilidad de acceso a los servicios.
Dicho estudio busca responder la pregunta: ¿Cuál es la disposición y capacidad de las administraciones de usar la tecnología para presar servicios públicos? Y con base en el comunicado emitido por la Secretaría de la Función Pública, México ha avanzado de manera relevante en estos aspectos. (SFP, Secretaría de la Función Pública, 2016)
Los retos del Gobierno Electrónico
Como en toda iniciativa, existen grandes desafíos a afrontar en el presente y futuro del Gobierno Electrónico, algunos expertos lo resumen de la siguiente manera:
“Debemos continuar con la agenda de Gobierno Electrónico con una visión 2017- 2030, que incluya los programas y planes relacionados con las TICs, con el compromiso de las instituciones públicas y de los diferentes profesionales en cada sector del gobierno y junto a ellos deben estar los gerentes de sistemas, la empresa y la academia integrando especialistas en gestión, investigación, desarrollo de software, telecomunicaciones, infraestructura y ciencias de la computación para apoyar desarrollos tecnológicos en e-servicios, interoperabilidad, conectividad, data centers, big data, inteligencia artificial, co-diseño, entre otros, todo ello con una visión holística e integral como desafío para los Ingenieros de Sistemas“. (Bernuy, 2016)
El anclaje entre el Gobierno Electrónico e Internet, establece retos que no distan de los que en lo general, existen en el mundo virtual y esos tienen que ver con:
1. Fortalecer el marco normativo orientado al uso de Internet para fines del Gobierno Electrónico. El tema que es muy debatido ya que generalmente se asocia con la censura y otros aspectos, mas en este caso se trata de diseño institucional que favorezca los desarrollos del gobierno digital, puesto que no se debe perder de vista que un servidor público solamente puede realizar lo que le esté permitido.
2. Garantía de la protección de datos personales en poder de las instituciones públicas y consecuentemente, del derecho a la privacidad. Se ha valorado ya la vulnerabilidad –con todo y sistemas de seguridad– de que es objeto la información que circula en la red, por lo tanto, esto es un riesgo inherente al uso de la web para la prestación de trámites y servicios.
3. Alfabetización digital. Si bien es cierto cada vez es mayor el número de usuarios de Internet, no necesariamente podemos hablar de una sociedad alfabeta digital, aún queda un largo camino por recorrer para lograr que se comprenda lo que existe en la red y cómo utilizarlo para alcanzar mayores niveles de bienestar.
4. Infraestructura tecnológica. En tal sentido, la cobertura de servicios de banda ancha representa sin duda, un aspecto esencial para que se logren los objetivos fundamentales del Gobierno Electrónico de tal manera que no sea excluyente.
Aún queda un largo camino no solamente en cuanto a las etapas que van alcanzando los países en lo referente al Gobierno Electrónico, ya que este debe obedecer a las necesidades más apremiantes de la sociedad, en tanto que fue diseñado con el objetivo de construir un puente entre ésta y su gobierno, mismo que continúa siendo frágil.
Trabajos citados
Bernuy, A. (14 de Septiembre de 2016). América Sistemas. Recuperado el 6 de julio de 2017, de Los desafíos del gobierno electrónico: http://www. americasistemas.com.pe/losdesafios- del-gobierno-electronico/
FSF. (06 de abril de 2017). Free Software Foundation. Recuperado el 5 de julio de 2017, de ¿Qué es el software libre?: https://www.gnu.org/philosophy/free- sw.es.html
IGovernment. (25 de julio de 2013). Gobierno Electrónico Universidad Tecnológica Metropolitana. Recuperado el 5 de Julio de 2017, de http://igovernmentutem.blogspot.mx/2013/07/ historia-paises-lideres-en- obierno.html
SFP. (09 de diciembre de 2013). Secretaría de la Función Pública. Recuperado el 3 de julio de 2017, de Gobierno Digital o Electrónico: https://www.gob.mx/sfp/documentos/gobierno-digitalo- electronico
SFP. (21 de agosto de 2016). Secretaría de la Función Pública. Recuperado el 6 de julio de 2017, de México líder regional y 19 del mundo en servicios en línea: http://www.gob.mx/sfp/prensa/ mexico-lider-regional-y-19-del-mundo-en-servicios- en-linea