Debido al apretado resultado en las elecciones para la gubernatura y la Senaduría, autoridades de Florida ordenaron un recuento de votos en ambos procesos celebrados el pasado martes.
El secretario de Estado de Florida, Ken Detzner, emitió la orden respectiva luego de que los cómputos preliminares arrojaran una diferencia de 0.5% en el caso de la elección para gobernador y de 0.25% en la de senador, lo cual por ley obliga a un nuevo conteo de los sufragios.
El candidato republicano Ron DeSantis aventaja por medio punto porcentual a su contrincante demócrata Andrew Gillum, por la Gubernatura de Florida; en tanto, el escaño en el Senado, Rick Scott, del Partido Republicano, supera por un cuarto de punto a Bill Nelson, del Partido Demócrata.
Tras conocer la noticia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su disgusto a través de su cuenta de Twitter, donde acusó un intento de “robarse dos grandes elecciones”, por lo que advirtió que estará atento a lo que ocurra.
Trying to STEAL two big elections in Florida! We are watching closely!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 10, 2018
Apenas el viernes, Rick Scott, actual gobernador y quien busca ahora la senaduría, consiguió que un juez obligara a la autoridad electoral del condado de Broward a entregar toda la información sobre los votos emitidos. Nelson, su adversario, lo acusó de utilizar su cargo para judicializar la elección.
No es la primera vez que el estado Florida se ve inmerso en un conflicto postelectoral; en la elección presidencial de 2000 fue el epicentro de la disputa entre el demócrata Al Gore y el republicano George W. Bush, quien a la postre fue declarado como ganador. En aquel entonces, el Tribunal Supremo paralizó un recuento de votos tras detectarse posibles irregularidades y los condados de Broward y Palm Beach, resultaron fundamentales para la polémica resolución final.
(Con información de AP y El País)
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