https://naavagreen.com/wp-includes/fonts/depo-25-bonus-25/

https://beccopizza.com/wp-includes/depo25-bonus25/

https://samouraimma.com/

Slot Qris

Slot Bet 100

domingo 15 septiembre 2024

Con el cobijo de la radio

por Marco Levario Turcott

Seguro le ha sucedido a usted, lector, que las palabras se le desvanezcan del pensamiento y más cuando dos cuartillas le esperan como un cospel para acuñar ideas en media hora. Es probable que eso ocurra porque traducir los sentimientos a la exposición razonada demanda un esfuerzo que necesita reposo, por ejemplo para escribir un editorial, lo que implica, al menos por unos minutos, hacer a un lado la decisión del gobierno federal de suspender la publicidad en las revistas del país.

Qué es lo que hay que redactar en este contexto, más aún, la pregunta es qué es lo que se debe redactar cuando se halla en riesgo uno de los terrenos más prolíficos de la cultura en el país y se aridece la razón y su vitalidad heterogénea, así como el intercambio creativo de ese pensamiento estructurado que llamamos escritura y de esa comunicación que implica la lectura.

Nuestros nexos indisolubles son con las letras libres, sin duda, en un proceso de cambio que pensamos irreversible dada la pluralidad que hay en este país donde cada quien tiene voz y voto. Sin embargo, ahora con qué certidumbres se puede pulsar el teclado si en la esfera pública se piensa que lo público es sólo visual. Dónde encontrar el ánimo frente a la palabra que se pisotea en nombre de las lealtades, cómo encontrar un hilo conductor cuando aquél, el que tiene el poder y lo ejerce implacable, no lee ni reflexiona sino que menosprecia, pontifica y castiga porque los otros, los que no piensan como él, no son patriotas o no valen la pena. De qué manera eslabonar letras desde la desesperanza y la indignación.

Aun en este panorama sombrío, no hay margen de duda para nosotros. Cuatro mil millones de pesos es mucho dinero, más aún si éste se orienta a la propaganda del gobierno federal en un país con tantas carencias. Pese a ello, en los últimos tres años el gasto en ese rubro ha crecido de manera exponencial y ahora se concentra en los medios electrónicos y, particularmente, en las dos grandes televisoras de México. Tal vez eso sea así porque, entre otras explicaciones, la política se ha convertido en un reality show televisivo y debemos adaptarnos a ello, como le dijo a esta revista el presidente Felipe Calderón cuando estaba en campaña para ocupar el cargo.

Entonces, dónde encontrar el ánimo para escribir un editorial después de revisar las antedichas palabras y, además, luego de no obtener respuesta oficial de los funcionarios responsables de la comunicación social del gobierno federal a quienes buscamos para conocer el motivo de aquella decisión. No hay oportunidad siquiera para decirles que, en efecto, vale la pena disminuir el gasto en publicidad y delimitar una ley que lo distribuya con criterios rigurosamente establecidos y no como ahora sucede. En todo caso habrá que esperar a que desde el Congreso de la Unión surja una iniciativa en tal sentido, entre otras cosas además de las ya mencionadas, para enfrentar el contraste que hay entre el costo de la producción de spots del gobierno federal que en estos años se acerca a los 60 millones de pesos, y los 89 millones orientados a todas las revistas, semanales y mensuales, de este país en un año.

No nos cabe duda de que este tema le implica también responsabilidades a los medios y que eso quiere decir que deben redoblar esfuerzos para acreditar su función social, incrementar sus lectores y buscar en el mercado anuncios de la iniciativa privada. Es decir, su fragilidad financiera no puede ni debe ser subsidiada por el Estado aunque también, precisamente por razones de Estado -como sucede en otros países democráticos-, el gobierno federal deba establecer montos de participación económica a efectos de contribuir a una oferta editorial versátil y plural.

Con ese panorama, continuamos con la búsqueda del estado de ánimo que enfrente a esa decisión política con razones, ideas y, sobre todo, propuestas. Y es precisamente ahora que caemos en la cuenta de lo reconfortante que es escuchar la radio. Frente al panorama nacional, la música. Los invitamos entonces a que cada quien sintonice la estación que quiera, nosotros ahora lo hacemos para escuchar algo de Los Beatles, ojalá que tengamos la suerte de oir esa de Lennon que convoca a imaginar un mundo mejor.

También te puede interesar

betvisa

jeetbuzz

jeetbuzz

jeetbuzz

winbuzz

winbuzz

daman game