25-01-2025

Mueren 13 bebés en Edomex por brote bacteriano que Sheinbaum había dicho que “está controlado” 

Compartir

Al menos trece bebés murieron en tres hospitales públicos del Estado de México por un brote de la bacteria klebsiella oxytoca cuya presencia se detectó desde la semana pasada pero se informó apenas ayer. A pesar de las 13 muertes, la presidenta Claudia Sheinbaum dijo que hubo “un caso” y que el brote “está controlado”. 

Este jueves 5 de diciembre, Sheinbaum fue interrogada por una reportera sobre el comunicado de prensa que un día antes difundió la Secretaría de Salud del Edomex, informando sobre la alerta epidemiológica ordenada por la Secretaría de Salud federal por la presencia de 20 casos de infección en hospitales. 

Tal como en su momento lo hizo Andrés Manuel López Obrador –por un brote de la misma bacteria en hospitales de Tabasco, en 2020—Sheinbaum minimizó el asunto.  

“También va a informar la Secretaría de Salud, ayer me informaron de un caso, digamos que está controlado y va a informar la Secretaría de Salud”, dijo, en unos cuantos segundos, para luego cambiar de tema. 

Por la tarde, en un comunicado colgado en la página oficial del gobierno y replicado en la cuenta de X de la SSA, el gobierno federal informó del fallecimiento de los 13 menores de edad, pero omitió decir que se trataba de bebés. En el comunicado dijo que se trataba de “pacientes pediátricos de 0 a 14 años de edad”, y enfatizó que los pacientes tenían “comorbilidades”. 

La infección se catalogó como Infección del Torrente Sanguíneo y se determinó que entró vía nutrición parenteral, es decir, mediante suero intravenoso. Así, la dependencia aprovechó para señalar “de manera preliminar” como responsables a dos empresas, que, especuló, habrían proporcionado material contaminado o incluso, caduco. 

En diversos medios ya se dice que el contagio se debió al uso de material médico caduco, pero esto no tiene sentido, ya que la bacteria klebsiella oxytoca proviene del intestino humano, que prolifera en ambientes hospitalarios debido al manejo de heces humanas y que se transmite cuando en los hospitales no hay la debida higiene. 

Tampoco dijo que se trata de la misma bacteria que en 2020 contaminó la heparina sódica que se le puso a 16 pacientes en un hospital de Pemex, en Tabasco, que fallecieron. 

No sólo eso: la dependencia señaló como supuestos responsables a dos empresas proveedoras que, dijo, pudieran haber vendido material médico contaminado.  

Respecto a este asunto, hay dos documentos a tomar en cuenta: el comunicado estatal del 4 de diciembre y el comunicado federal del 5 de diciembre. 

PRIMER COMUNICADO:  DICE QUE LOS PACIENTES SIGUEN VIVOS, PERO HABLA DE “COMORBILIDADES” 

En el primer comunicado se informa que el 28 de noviembre pasado la Dirección de Información Epidemiológica notificó de 15 casos de Infección del Torrente Sanguíneo por la mencionada bacteria en cuatro hospitales: tres públicos y uno privado y que se emitió en consecuencia una Alerta Epidemiológica. 

Y afirma de manera clara que los pacientes están vivos. “La Secretaría de Salud mexiquense subraya que los pacientes se encuentran hospitalizados y con atención médica continua y oportuna”. Pero claramente prepara el terreno para anunciar las muertes: “la dependencia señala que todos los casos presentaban de forma asociada diversas comorbilidades”.  La misma excusa que usó Hugo López-Gatell en la pandemia para justificar los cientos de miles de muertos. 

Dijo que “son 15 casos confirmados, cuatro probables y uno descartado”.  

SEGUNDO COMUNICADO: INFORMA DE TRECE MUERTES  Y CULPA A PROVEEDORES MÉDICOS 

El segundo comunicado, federal, se publicó en la página oficial del gobierno de México. Dice que la investigación sobre el brote comenzó el 29 de noviembre tras detectar 20 casos sospechosos. 

Evita señalar las edades y apunta que todos los pacientes“son pediátricos, en un rango de edad que va desde 0 a 14 años”. Sin embargo, padres de familia que hablaron confidencialmente con varios medios, confirmaron que los fallecidos son bebés, todos ellos. 

Enfatiza que de los 20 casos originalmente detectados “se registraron 13 defunciones de pacientes que poseían comorbilidades”, pero dice que aún no es totalmente seguro que se trata de la mencionada bacteria, sino que ello está en “proceso de dictaminación”.  

Y pasa lo más pronto posible a culpar a proveedores médicos: “Este brote está preliminarmente vinculado con soluciones intravenosas de nutrición parenteral o con los insumos utilizados para su aplicación que podrían estar contaminados. Las investigaciones iniciales indican una posible contaminación en las soluciones NPT de la empresa SAFE, pero no se descartan otras hipótesis”. 

Más adelante, involucra a otra empresa: Productos Hospitalarios S.A. “Este miércoles 4 de diciembre la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) emitió una alerta sanitaria en la que informa a los profesionales de la salud y al Sector Salud, sobre la inmovilización de manera preventiva y suspensión del uso y administración de soluciones intravenosas de nutrición parenteral (NPT), preparadas a partir del 21 de noviembre por la empresa Productos Hospitalarios, S.A. de C.V”. 

 FALTA DE HIGIENE, LA CAUSA COMÚN  

Una revisión básica de literatura médica realizada por etcétera encontró que la bacteria klebsiella oxytoca es parte normal de la flora bacteriana del intestino humano, pero que cuando sale de ese entorno y entra en contacto con las mucosas o la piel, provoca severísimas infecciones. 

Se trata de una bacteria altamente resistente a los antibióticos y, suele provocar infecciones del tracto urinario.  

Es parte de la misma clase a la que pertenece la salmonella y la escherichia coli, que provocan también muy graves padecimientos.  

En todos los casos, su contagio y proliferación se deben a la falta de higiene.  

Considerando las numerosas denuncias hechas por personal médico durante la llamada 4T que señalan falta de insumos de toda clase, desde papel sanitario hasta elevadores funcionales, pasando por batas y cubrebocas, es altamente probable que esta clase de brotes sean resultado de la carencia de elementos de limpieza, antisépticos, guantes, cubrebocas y productos sanitarios. 

ofv

Autor