lunes 06 mayo 2024

Deporte y política, ¡fracaso seguro!

por Ricardo Alemán

Luego de la crítica a las estupideces de Cuauhtémoc Blanco —y que alguna oficina de Cuernavaca nos mandó “santa madriza” en redes—, hurgamos para demostrar que la combinación entre deporte y política ha sido —históricamente— un fracaso seguro.


Es decir, se equivocan del cielo al infierno todos los que creen que un atleta olímpico o un deportista famoso tiene las mismas cualidades que lo hicieron brillar en las pistas y en las canchas para el desempeño en la política y/o en el poder.


Muchos se desempeñan con profesionalismo en actividades relacionadas con los deportes —como el periodismo deportivo—, pero la política y el poder parecen ser el agua y el aceite. ¿Lo dudan?


1. Bernardo Segura, marchista reputado a partir de Sídney 2000, cuando fue descalificado a pesar de llegar en primer lugar. Años más tarde lo despidieron del Instituto del Deporte del Distrito Federal por tráfico de influencias.


2. Ana Gabriela Guevara: ex campeona mundial en 2003, la atleta se incorporó a las filas de la política, primero en el PRD y años después se convirtió en senadora por el PT, gracias a la influencia de AMLO. ¿Qué ha hecho como senadora, además de cobrar los bonos y las dietas? Nada. En 2011 la PGR le inició una investigación por defraudación fiscal. Recientemente fue noticia por la golpiza que le propinaron unos hombres tras un incidente de tránsito.


3. Tatiana Ortiz Galicia: después de que en 2008 ganó la medalla de bronce en clavados sincronizados en la plataforma de 10 metros decidió inmiscuirse en la política, por lo que ganó una regiduría en el Estado de México —en 2012— por el PRI. Sin embargo, las autoridades mexiquenses le abrieron una carpeta de investigación por extorsión, abuso de autoridad y enriquecimiento ilícito.


4. Fernando Platas: clavadista olímpico, se convirtió en el titular del Instituto Mexiquense de Cultura Física y Deporte del Estado de México. En 2015, Alfredo Castillo, titular de la Comisión Nacional del Deporte (Conade), lo señaló como el orquestador de la sanción impuesta por la Federación Internacional de Natación (FINA), luego de declinar a la organización del Mundial de Natación 2017.


5. Cuauhtémoc Blanco: futbolista; desde el primer día de 2016 dice ser alcalde de Cuernavaca, Morelos, a pesar de que un grupo de socios y amigos toman las decisiones del gobierno. Se le acusa de presuntos vínculos con el crimen organizado y mantiene una feroz disputa con el gobernador Graco Ramírez, quien hizo lo que debía, ya que Blanco puede terminar en una amenaza peor que la familia Abarca en Iguala, Guerrero. Es cuestión de tiempo.


6. Jorge Kahwagi: boxeador y político, pero también blanco de constantes escándalos. Primero decidió entrar a la casa de Big Brother. También ha sido criticado por sus operaciones estéticas. Su paso por la política fue tan falso como sus peleas de box. Fue secretario y presidente del Partido Nueva Alianza. La fiesta es lo suyo.


7. Soraya Jiménez: pesista ganadora de medalla de oro en Sídney 2000. Primera mujer en conseguir un logro como ese. Coqueteó con el PAN en el gobierno de Felipe Calderón para atraer a las filas partidistas “talento deportivo”. Antes de su muerte prematura se le acusó de la falsificación de documentos que la acreditaban como pasante de la carrera de Administración de Empresas, en los previos a una competencia internacional.


8. Alejandro Cárdenas: el velocista fue subdirector de Calidad para el Deporte de la Conade (2009­-2013). Durante su cargo se le acusó de pagar 2 millones de pesos para adquirir equipo deportivo de halterofilia, proyecto que dejó inconcluso.


9. Carlos Hermosillo: uno de los futbolistas más recordado por la gente del Cruz Azul, en 2006 lo nombraron titular de la Conade, pero lo acusaron de trabajo ineficaz y de no transparentar los recursos.


10. Raúl González: el exmarchista consiguió la medalla de oro en 1984. En 1988 fue titular de la Conade y se mantuvo en constante conflicto con Mario Vázquez Raña, presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM). El resultado de ese enfrentamiento se dio cuando en los Olímpicos de Barcelona (1992) enviaron 102 atletas, pero solo obtuvieron una medalla.


11. Daniel Bautista Rocha: marchista que destacó al obtener la medalla de oro en los juegos de Montreal en 1976 se convirtió en regidor de Monterrey. Pasó sin pena ni gloria en el cargo. La lista puede seguir, pero no existe un solo caso de éxito político y eficacia en el ejercicio del poder por parte de un exdeportista.


¿Así o más claro?


Al tiempo.



 


Este artículo fue publicado en Milenio el 21 de diciembre de 2016, agradecemos a Ricardo Alemán su autorización para publicarlo en nuestra página.

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