Cómo recibiste el canal y cuáles son las expectativas que tienes de tu gestión?
- Creo que el canal había cumplido una etapa, trasmitía principalmente las sesiones de comisiones y plenarias; y creo que eso ocupaba una enorme cantidad de horas. Incluso esas transmisiones también servían, cuando los periodos de receso para, digamos, llenar huecos. Sin embargo me parecía que estas retransmisiones de pronto se volvían obsoletas y ya no ayudaban en mucho a reflejar el dinamismo del Congreso. ésas fueron algunas de las cosas que encontré y afortunadamente las pude modificar, en el sentido de ir estableciendo criterios: es prioritario mantener lo más cercano posible las grabaciones que realicemos a las transmisiones. Eso te lleva a que los procesos de edición sean más dinámicos, a llevar un registro de las grabaciones y a ponderar aquellas que en un momento dado no son prioritarias y, por tanto, en dado caso no transmitirlas. Lo otro era la continuidad. Esos bloques que para el caso del Canal del Congreso, que es muy sui generis y que no existen en ningún otro canal en donde las sesiones plenarias y las de comisiones, al no tener una duración establecida rompen todas las posibilidades de programar. Yo encontré una barra importante, la del noticiario y ahora he fortalecido una barra de opinión que es de las 9 a las 11 de la noche, y todavía, incluso ahí, hay espacios por programar. ése es uno de los retos: diversificar contenidos, llegar a más audiencia y diversificar los sectores a los cuales llegamos.
Es un reto hacer atractivo el tema legislativo.
Foto: José Miguel Luna - Las sesiones de comisión o plenarias no pueden ser más ni menos dinámicas, simplemente son. Me parece fundamental que eso sea así, porque creo que el público, los periodistas, no aprecian en su dimensión las demás sesiones, aquellas que de pronto pueden parecer aburridas pero que brindan oportunidad de que en el momento de una coyuntura política, social o económica para el país pueda comprenderse plenamente, porque se vio no solamente la sesión coyuntural. Además no podemos aplicar un criterio discrecional, el criterio es abrir las sesiones de comisiones legislativas y las plenarias. Antes se abrían solamente las sesiones de comisiones de las cuales nos llegaba solicitud, luego entonces lo que se ponderaba no era el criterio periodístico ni el interés público.
Creo que ésa es una perspectiva central, porque ya no te asumes en una actitud oficialista solamente, donde, bueno, me están pidiendo que cubra esto, está bien y, creo que todos ustedes lo hacen, pero hay que agregar esa parte de interés público y de interés periodístico para el canal. ¿Cómo hacerlo más atractivo? Me parece que tenemos que fortalecer la programación con barras de opinión, o con cápsulas de diversos formatos que nos permitan traducir lo que el legislador está queriendo decir, producir programas en donde se oigan más voces, que participen analistas políticos como ahora lo estamos haciendo.
¿Qué tan apremiante es, entonces, el reto de invertir en el canal?
- Creo que en la televisión pública, normalmente en lo que toca a la actualización tecnológica era algo que se iba posponiendo; favorecías y ponderabas: bueno hay que mejorar los contenidos, en fin, y me parece que en ese sentido la televisión pública se equivocó durante años, porque los instrumentos tecnológicos también dan posibilidad de generar otro tipo de contenidos. Yo digo que la imagen es contenido y que el contenido es imagen, ambas. Tuve que diseñar el presupuesto para el 2008, donde avizoraba la señal abierta, creo que los legisladores también lo entendieron y decidieron que este canal tenga mayor fortaleza tecnológica. Esperamos 45 millones de pesos, con una aportación paritaria de ambas cámaras, para lo que sería fundamentalmente la instalación de la estación transmisora de la señal abierta -espero que en unos meses más tengamos la autorización-, y alrededor de 16 o 20 millones de pesos para lo que sería la operación del canal.
¿Qué han revelado los estudios de audiencia del canal el Congreso?
- La empresa Ipsos Bimsa realizó un estudio; queda claro, en este primer levantamiento, que las personas que más ven el canal son las de mayores ingresos, es decir, clase media, media alta. Eso tiene cierta concordancia porque la señal llega fundamentalmente a través de la televisión por cable y de la televisión de paga como Sky. Me parece que también ha sido, y esto es un paréntesis, una muy buena oportunidad para que el canal del Congreso sea visto en zonas rurales o indígenas.
Regresando al punto, la audiencia es clase media, clase media alta; y algo que vi con mucho agrado, la mitad de los televidentes son mujeres y la mitad son hombres, hay un porcentaje mínimo de diferencia, generalmente en los estudios de audiencia los hombres llevan la delantera, en nuestro caso no. Creo que México adolece de estudios cualitativos que en un momento dado digan qué quiere esta audiencia. Los datos que nosotros tenemos hasta ahora, que son del IBOPE, nos ponen frente a Discovery Kids, que mundialmente tiene un porcentaje altísimo de audiencia o nos ponen frente a Discovery Channel, pero no tenemos realmente un referente concreto, porque mientras Canal Once y Canal 22 sí tienen una salida abierta IBOPE puede darles una cifra más cercana a la realidad.
¿Cuál es tu programa de radio favorito?
- Los noticiarios en general. Me divierto mucho con El hueso de la W. En la mañana mi rutina es: estaciones de radio, prensa cuando llego a la oficina y cierro con noticiaros de televisión y, por supuesto, el noticiario del Canal del Congreso de 8 a 9 de la noche. Incluso llego a la obsesión de que si no logro ver algunas notas porque todavía es un horario fuerte el de 8 a 9, a la mañana siguiente estoy con la estación de radio y viendo la repetición del noticiario.
¿Qué no te gusta de los medios públicos?
- Me parece que durante muchos años tuvieron una visión, por calificarla de alguna manera, minimalista, una visión de autocomplacencia, de falta de autocrítica. En este país nos tardamos en abordar el tema, me hubiera gustado que hubiera sido en los años 80, cuando me acuerdo que comenzaban los debates sobre, por ejemplo, el tema de la autonomía. Yo dirigí varios años una televisora regional y ése era un tema fundamental, ahora está ligado a la posibilidad de diversificar los ingresos para que además de todo se logre autonomía en la operación. Digamos que me gustan más ahora, me parece que hay ejemplos en toda la República y aquí mismo en el DF, de los que han avanzado mucho,
¿Es imposible un reportaje o una mesa redon-da en el Canal del Congreso sobre el dispendio legislativo?
- No es imposible, aunque fíjate que mis baterías en lo personal y en lo institucional están justamente en cómo hacer para poner el dedo en el análisis sobre las iniciativas de ley, los puntos de acuerdo, así como los puntos de vista de los legisladores. Me parece que respecto del dispendio de diputados y senadores informan la prensa (de manera muy central), la radio y los propios noticiarios de la televisión, sobre todo cuando coyunturalmente les conviene golpear al Legislativo, lo hacen todavía de manera más acentuada. Creo que puede ser maniqueo, pero no es impensable, no, pero con un enfoque donde no solamente estés evaluando el asunto del dispendio sino que evalúes y confrontes eso con la responsabilidad que tiene el legislador frente a sus representados.
¿Por qué vale la pena ver el Canal del Congreso?
- Buena pregunta, ¿eh?, me hizo pensar en muchas cosas al mismo tiempo porque, digo, yo lo he visto durante varios años y digamos mi trabajo, mi tarea profesional me ha llevado a mirarlo muchas horas, pero pensando en términos de los televidentes, me parece que puede ser un instrumento fundamental para valorar en su justa dimensión a un poder que para fortuna de este país apenas, de unos años para acá, se ha convertido en un factor de equilibrio ante los otros poderes, colocándose como un factor de control de gestión del ejecutivo y que por tanto el poder legislativo.
¿Qué tanto te preocupa el rating?
- Me preocupa sí. También me parece que esa visión que en algún tiempo imperó en los medios públicos en donde bueno, pues lo que produzco está bien, oye ¿pero, cuánto nivel de audiencia tienes? No pues, no sé, pero está muy bien producido ¿no? Me parece que en una TV pública, sobre todo si consideras que utiliza recursos públicos debes llevar a cabo acciones muy concretas como las que he mencionado, que así debe ser pensando todo el tiempo en la audiencia.
¿Te gustaría ser diputada o senadora?
- No.
¿Cuál fue el último libro que leíste?
- Estoy leyendo A pesar del oscuro silencio de Jorge Volpi y releyendo Cien años de soledad, ya ves que Alfaguara reeditó la novela por sus 40 años.
¿Qué película mexicana reciente está entre las que más te han gustado?
- El laberinto del fauno de Guillermo del Toro
¿Norman Mailer o Truman Capote?
- Truman Capote
¿Cantas bien las rancheras?
- Pues no las rancheras, canto a los Beatles, pero me dice mi hijo: mamá, mejor chíflala.
¿Mambo o Chacha-chá?
- Chacha-chá.
¿George Clooney o Brad Pitt?
- Brad Pitt.
¿Tequila o whisky?
- Vino tinto.
¿Tu color favorito?
- El negro y el blanco, también.
¿Estás de acuerdo con la legalización de la mariguana?
- Sí.
¿Qué prefieres, que te pidan perdón o que te pidan permiso?
- Depende ¿no?, depende de las circunstancias y bien dices, depende de quién.
¿Tanga o calzón de manga larga?
- ¡Qué! (risas). Ah, no, no, no. ¿No podemos corte francés?
¿Cuál es el mejor piropo que te han dicho?
- Eh, bueno, el que a mí más me gusta ¿no?, pues no sé, reconocerme como una mujer fuerte, inteligente, que sea esta doble parte que alguien perciba, que no solamente vea físicamente sino que me vea de manera integral.
¿Y cuál es el que tú has dicho?
- A mi marido, Ignacio Tapia, espero que él piense lo mismo, le digo que es un hombre a mi lado y de mi lado.
¿Cuáles fueron tus propósitos de año nuevo?
- No creo mucho en eso ¿eh? Esta época es buena oportunidad de apapachar gente que quiero y de pasar más tiempo con mi familia.
¿Cómo te imaginas dentro de 20 años?
- Ojalá tenga la oportunidad de envejecer haciendo lo que me gusta. También me imagino viendo a mis hijos Nacho y Rodrigo en la universidad, me ilusiona mucho verlos realizados profesionalmente, que sean jóvenes felices. Me veo en familia.
¿Qué epitafio tendría tu partida?
- ¡ándale¡ ya me lo adelantaste… Aquí yace una mujer de principios, de convicciones y que amó la vida.