En vísperas de las elecciones de 2012 Andrés Manuel López Obrador dijo que 60 mil muertos y “muchos” desaparecidos en el sexenio de Felipe Calderón le parecían una “situación trágica, dolorosa” y responsabilizó al panista de ella. Al término de su gobierno, el tabasqueño presenta mucho peores resultados en ambos aspectos, pero no sólo no asume responsabilidades sino que ha exhibido su indolencia, expresado burlas y hasta se ha victimizado.
En una entrevista colectiva realizada el 6 de junio de 2012 en Tercer Grado, programa de Televisa, con ocho periodistas, el entonces candidato presidencial fue preguntado sobre cuestiones como la militarización, la seguridad pública y los homicidios, además de que él expresó su consternación por las personas desaparecidas. En los dos últimos temas fue especialmente tajante.
Entonces, el tabasqueño fue preguntado por Ciro Gómez Leyva: “Si ganas, ¿piensas denunciar al presidente Calderón por los 60 mil muertos ‘de la guerra de Calderón’, como dicen?”. Y enfatizó si esos occisos eran “del” entonces presidente.
“Sí son personas que han perdido la vida, y son 60 mil aproximadamente (ustedes llevan ahí un registro), y muchos desaparecidos. Es una situación trágica, dolorosa”, enfatizó el macuspano.
El periodista insistió: “¿Imputables a Calderón?”. Contestó López Obrador: “Hay una responsabilidad porque él es el titular del Ejecutivo”.
Carlos Marín intervino: “¿Pero él mandó matar a esas personas?”.
“Es que son dos cosas: una cuestión es que él sea culpable y otra cosa es que sea el responsable. Yo creo que sí es responsable. Pero vamos por partes: yo siento que él abordó mal el problema; o sea, no sabía lo que iba a enfrentar. Yo no hubiese actuado así, pero, además, sostengo que no se puede enfrentar la violencia con la violencia, el mal con el mal”, dijo el entonces político opositor.
Más adelante, el tabasqueño continuó: “Yo no haría lo que hizo el presidente Calderón; primero, yo hubiese actuado a partir de un diagnóstico, de conocimiento real. Siento que él se precipitó, para decirlo de manera amable, y que le pegó un garrotazo al avispero”. Y prometió que el suyo no sería “un gobierno de ocurrencias”.
Prometió: “Vamos a garantizar la paz, la tranquilidad, vamos a serenar al país. Es mi compromiso”.
Ahora, concluido su gobierno, se puede afirmar categóricamente que López Obrador sólo zopiloteó con los temas de homicidios, personas desaparecidas, seguridad pública y militarización porque sus cifras respecto a los gobiernos anteriores son francamente peores, y no por poco.
Revisemos los datos de asesinatos: según los datos presentados en junio de 2024 por Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, entre 2019 y mayo de 2024, se registraron 184 mil 510.
Si completamos ese conteo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública correspondientes a diciembre de 2018, y a junio, julio, agosto y septiembre (hasta el día 29) de 2024, en el sexenio de López Obrador hubo, al menos, 195 mil 896 asesinatos, un incremento de más de 220 por ciento respecto a la cifra con la que el tabasqueño se conmocionaba en 2012 (60 mil) y de los que hacía responsable a Calderón.
Pero, según los propios datos oficiales presentados por Rodríguez en junio, en realidad con Calderón hubo 121 mil 613 homicidios (no 60 mil), mientras que en el gobierno de Enrique Peña Nieto ascendió a 157 mil 158.
Así, al cierre de su sexenio López Obrador superó en homicidios a Calderón por 74 mil 283, un incremento del 61 por ciento, y a Peña Nieto por 38 mil 738, 24.6 por ciento más.
En el promedio diario de asesinatos eso se ve con mucha más claridad: con Calderón hubo 55.4, lo que aumentó a 71.7 con Peña Nieto, y ha llegado al 92.1 con López Obrador.
Pese a todo ello, ahora el macuspano no ha asumido enteramente la responsabilidad de esa situación, sino más bien al contrario.
El tabasqueño también mencionó, compungido, la situación de las personas desaparecidas. Allí sus números son aún más desastrosos: según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, con Calderón hubo 40 mil 544 casos, mientras con Peña Nieto 99 mil 977. En el sexenio de López Obrador, con dos meses menos de gobierno que sus antecesores, se alcanzó la cifra de 148 mil 523.
Durante el gobierno de López Obrador hubo más personas desaparecidas que, sumados, los sexenios de Calderón y Peña Nieto. El morenista tuvo 266 por ciento más casos que el michoacano.
En aquella entrevista de 2012, con números muy malos pero que son inferiores a los de su gobierno, López Obrador decía que aquella era “una situación trágica, dolorosa”. Ahora, 12 años después, no ha mostrado ninguna responsabilidad por ello, sino una completa indolencia, y hasta se ha burlado de esos asuntos y de sus víctimas, como las madres buscadoras y quienes han resultado asesinados en masacres.
Así cerró su gobierno Andrés Manuel López Obrador: con récords en materia de homicidios, desaparecidos e indolencia.