La reunión de primavera del FMI y del Banco Mundial comenzó con la revisión del pronóstico económico mundial del Fondo. Resalta el fuerte empuje de dos economías, la de Estados Unidos y la de China, países que se han convertido en los motores económicos mundiales.
El otro lado de la moneda, tristemente, son las economías europeas y las emergentes. La falta de vacunas y nuevos confinamientos han hecho estragos en el resto de la economía mundial.
México, nuestro país, se queda rezagado en lo que el Fondo llama “recuperaciones divergentes”, con un proceso muy lento de vacunación y prácticamente nada de estímulo fiscal.
EU NOS JALA Y CRECEREMOS 5%
Aun así, el FMI eleva el pronóstico de crecimiento de México gracias a que nos está jalando Estados Unidos.
El pronóstico para 2021 de la economía mexicana sube del 4.3% al 5.0%. Dicha elevación, con todo y ser positiva, no nos lleva al tamaño económico que teníamos prepandemia.
Es más, llegar a los niveles prepandemia ni siquiera lo lograremos con el crecimiento del siguiente año.
Según el FMI, en 2021 creceremos 5.0% y en 2022 un módico 3.0%.
Será hasta 2023 cuando, por fin, alcancemos el mismo tamaño económico previo a la crisis de la pandemia, que nos llevó a la dramática caída de 8.5% del 2020.
El riesgo es claro para el sexenio obradorista. El riesgo es ser un sexenio perdido en crecimiento.
La misma Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI, ha pedido a los países que apliquen medidas de estímulo fiscal y en cuanto puedan ayuden al plan de vacunación. Aquí en México no hemos tenido ni lo uno, estímulos, ni lo otro, vacunas.
FMI PROPONE EXPANSIÓN, NO AJUSTE
A favor del gobierno obradorista podemos decir que no busca endeudarse y que mantiene la disciplina fiscal. Sin embargo, la disciplina fiscal practicada en la presente administración ha sido tan ortodoxa, que es poco práctica. Ha arrojado una economía más pequeña, una caída del consumo interno, de la inversión interna, llevando a una recuperación tan lenta que agrava el empleo y la pobreza.
En cambio, lo que sí tenemos es la recuperación (expansión) de la economía de EU, con Joe Biden, nación que acaba de recibir el megaplan fiscal de 1.9 billones de dólares, que está por iniciar su megaplan de infraestructura y que está jalando a la economía mexicana mediante las exportaciones y las remesas.
EU crecerá este año, según el FMI, un extraordinario 6.4%. Pero el costo lo sabemos bien, es el déficit fiscal. Y para financiarlo, apareció la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, quien se ha convertido en la líder multilateral de la reunión del FMI-Banco Mundial con su propuesta fiscal no sólo para cobrar impuestos a los corporativos en EU, sino cobrarles a las multinacionales a nivel global. Sería un impuesto global mínimo de 21%, que ha caído bien en las demás economías.
¿Quién lo diría? La receta ortodoxa del gobierno mexicano no es la que el Fondo promueve.
Este artículo fue publicado en Excélsior el 07 de abril de 2021. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.
